Los sindicatos CIG, CCOO y UGT no acudieron ayer a la reunión convocada por la Xunta para abordar el código ético aprobado por el Gobierno gallego y que afecta a todos los trabajadores públicos, a los que impone, entre otros aspectos, la prohibición de aceptar regalos. Y calificaron el texto de "código patético" y descartan "participar en el lavado de cara del PP". "Solo sirve para desviar la atención de los múltiples casos de corrupción en los que están implicados varios cargos institucionales del PP en Galicia", alegaron. El sindicato CSIF presentará alegaciones al texto la próxima semana.