La Xunta tiene ya listo el Plan Sectorial de Actividades Extractivas con el que pretende legalizar las explotaciones mineras que se encuentran en situación irregular en la comunidad autónoma y que, según un estudio del Colegio de Minería de Galicia, superan el 25 por ciento de las que están en activo actualmente.
El documento que regulará esta actividad sostiene que son "un número importante", si bien se desconoce cual es la cifra exacta de explotaciones que funcionan sin licencia. El primer paso será "identificar" y "localizar" cada una de las actividades extractivas para comprobar su situación jurídico-administrativa. "Todo esto con la finalidad de respetar los aprovechamientos que dispongan de licencia urbanística municipal y de establecer el proceso para que las actividades extractivas carentes de ella o de otros documentos preceptivos puedan obtenerlos", explica el plan.
La última reforma de la Lei do Solo abría ya la posibilidad a regularizar estas explotaciones mineras. Según esta normativa, las minas que estén ubicadas en suelo rústico de protección ordinaria, de tipo forestal o de aguas solo tendrán que acreditar que estaban ya activas antes de la primera Lei do Solo de 2002 para regularizar su situación. Para las que se ubiquen en las demás categorías de suelo rústico se requiere una autorización del Consello de la Xunta para legalizarse.
Sin embargo, el documento de la Consellería de Economía constata las dificultades por las que pasan las empresas para regularizar su situación y solicitar licencias. "La consecuencia es que son muchas las explotaciones que, pese a tener realizados los correspondientes trámites, no cuentan con las preceptivas licencias, con la consecuente inseguridad jurídica, riesgo para el desarrollo del sector y una inmerecida visión de ilegalidad por parte de la opinión pública", explica el plan minero.
Aunque no existen datos exactos de cuántas explotaciones mineras están en situación irregular, el Colegio de Minería realizó una encuesta en el sector y constató que el 24 por ciento de las minas en suelo rústico no solicitaron ningún reconocimiento administrativo para regularizar su situación. Además solo el 21 por ciento tiene licencia urbanística y únicamente el 25 por ciento tiene permiso municipal de actividad.
Además de regularizar las explotaciones mineras existentes, el nuevo plan de actividades extractivas permitirá la ampliación y autorización de nuevas minas. Según el documento de la Consellería de Economía, no habrá zonas del territorio excluidas de esta actividad. De hecho estarán permitidos estos aprovechamientos en todo tipo de suelo rústico, incluido el de especial protección de espacios naturales.
Anova denunció que éste es "un plan de actividades depredadoras del territorio" y censuró que se dé amparo legal a minas como la de Corcoesto. La asociación ecologista Adega, por su parte, advirtió que la patronal minera podrá ahora "asaltar nuevos territorios hasta ahora vedados".
