Las operaciones de saneamiento de CatalunyaCaixa elevaron sus pérdidas del año pasado a 11.856 millones que la entidad atribuye al traspaso de los activos a la Sareb, con un descuento del 59%, sobre el precio, de 16.496 millones a 6.708 y a los costes de la reestructuración de personal, que ya han sido dotados por 1.250 millones. Las tres entidades nacionalizadas suman así unas pérdidas de 30.584 millones y todo el sector de las antiguas cajas, 39.280. A los 11.856 millones de la entidad catalana, hay que sumar los 7.937 millones de NCG Banco y los 20.791 millones ya declarados por Bankia.

La entidad catalana espera completar "el grueso" de su reestructuración en 2014, y destacó la evolución positiva de su negocio financiero, con un margen de intereses que creció un 10% en 2012. La firma catalana todavía tiene pendiente de negociar la reestructuración de plantilla, que se emprenderá en cuanto se constituya la comisión gubernamental que debe definir el proceso.