Los profesores de Castilla-La Mancha, Madrid o Navarra también están en pie de guerra en este inicio de curso, con protestas y actos de indignación, ante la decisión de sus administraciones educativas de ampliar su horario lectivo; una situación similar a la que vive Galicia.

El mayor cambio corresponde a la docencia castellano-manchega, comunidad en la que María Dolores de Cospedal ha optado por incrementar dos horas tanto en Primaria como en Secundaria. En dicha comunidad pasan de 23 a 25 horas de clase en Infantil y Primaria y de 18 a 20 en Secundaria. El ahorro estimado con esta medida es de 139 millones de euros. Ayer mismo la Junta comunicó a los centros de Secundaria la reducción de profesores, colectivo que prevé protestas. En el caso de Madrid, el incremento se produce en Secundaria: también de 18 a 20 horas semanales. Esperanza Aguirre confirmaba ayer el aumento, tras una equivocación previa. Dos profesoras de un instituto de Las Rozas se encerraron en señal de protesta. En Navarra, pasan de 17 a 18 horas en Secundaria