En su primer encuentro con la Asamblea de Caja Madrid ayer,el presidente de la entidad, Rodrigo Rato, afirmó que en 2010 se cumplirán"los objetivos previstos y concluirá el año con un beneficio similar al del pasado ejercicio".Un pronóstico de evolución del negocio,en el que está también muy presente la reestructuración del sector y en el que el ex director general del FMI admite que está estudiando "operaciones de crecimiento" que puedan"mejorar su rentabilidad, productividad y eficiencia", según informó la entidad en un comunicado. En su discurso ante la Asamblea general ordinaria,que aprobó las cuentas anuales correspondientes a 2009,año en el que la caja madrileña obtuvo un beneficio atribuido de 265,8 millones de euros,Rato sostuvo que "Caja Madrid está valorando las oportunidades"que puedan surgir." Cualquier operación de crecimiento inorgánico que pueda aparecer será analizada y aprovechada siempre que encaje dentro de nuestra estrategia",dijo Rato,convencido de que la caja saldrá reforzada en este nuevo mapa financiero que se configura y"será ganadora".Fuentes presentes en la Asamblea indicaron a Europa Press que Rato no aludió durante su discurso a ninguna entidad en concreto,como es el caso de la CAM, que podría ser objeto de su interés. Rato indicó que Caja Madrid trabaja en reducir su morosidad y en medidas para reforzar su capital y mantener así su posición de liderazgo, y que la entidad no se siente"especialmente presionada"por la guerra del pasivo, por lo que seguirá cuidando de sus buenos clientes.