El Consello de Contas recomienda que sea el Sergas quien defina las prestaciones y tome la iniciativa sobre el modelo de servicios que ofertan los hospitales concertados, y no al contrario, como la mejor fórmula "para evitar el encarecimiento de los conciertos".

Así lo advirtió ayer el conselleiro mayor de la institución, Antonio López, al presentar en Comisión parlamentaria la memoria de actividades de 2008, el programa de trabajo de 2009 y el informe de fiscalización del sector público de la Comunidad autónoma de 2006. En este ejercicio, según López, los presupuestos de Sanidad se incrementaron en un 11%, realizándose un importante esfuerzo en atención primaria y especializada, además de aumentar el gasto en los centros concertados del Sergas. Debe ser el Servicio Galego de Saúde, según apuntó el conselleiro mayor, el que tenga la iniciativa para determinar cuáles son los servicios que se deben prestar y que no sea la entidad concertada la que decida, porque este sistema "implica un incremento de costes".

El informe de fiscalización de las cuentas generales del Sergas al que hizo alusión el conselleiro mayor indica que el gasto en asistencia sanitaria con medios ajenos al Sergas a través de conciertos se incrementó un 51,5% entre 2002 y 2006, pasando de 128.514.000 euros a 194.677.000.

Pese a que esta cantidad supone sólo un 6,2% del gasto real del Sergas en 2006, cinco años atrás representaba un 5,7%. Además, mientras la inversión en conciertos se incrementó un 51,5%, el gasto real del Servicio Galego de Saúde experimentó un crecimiento menor, de un 38,8%. La negociación de los conciertos se realiza de forma estimativa, de modo que, en muchas ocasiones, se incrementa el coste final: " las cantidades abonadas finalmente a los centros concertados superan el importe del gasto autorizado en la firma del concierto; el volumen del gasto realizado sobre lo previsto inicialmente se incrementó en un 7,58%".

El informe de fiscalización incide, además, en la antigüedad de los conciertos y en la necesidad de revisarlos, ya que los acuerdos con algunos hospitales se mantienen desde hace 10, 19, 23 e incluso 29 años. Los conciertos se establecen como colaboración a la actividad ordinaria. A modo de ejemplo, el Consello de Contas apunta que en el Complejo Hospitalario de A Coruña, 2.035 salidas de la lista de espera quirúrgica fueron atendidas mediante derivaciones a centros concertados y, en el Xeral-Calde, estas derivaciones ascendieron en 2006 a 1.736 intervenciones. López aconsejó promover"bases claras" y que haya la "máxima transparencia" en la negociación de conciertos de la sanidad pública con la privada, así como separar la función de control de la gestión de los centros concertados.