La creación de la comisión de seguimiento de las obras del AVE en Galicia va camino de convertirse en un folletín, ya que el dificultoso trabajo de los partidos gallegos para alcanzar un acuerdo de consenso en el Parlamento quedó sepultado al negarse la ministra de Administraciones Públicas, la gallega Elena Salgado, a crear ese órgano de control dentro de la comisión bilateral Xunta-Estado, lo que haría rebajarle sustancialmente el rango institucional. El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, se mostró ayer más diplomático al expresar su confianza de que, pese a las reticencias de Salgado, la comisión se constituirá. Pero el vicepresidente, Anxo Quintana, a quien le competen las relaciones institucionales con el Estado, no se mordió la lengua y demandó a la ministra una "rectificación" urgente de su postura y la acusó de "faltarle al respeto a Galicia y a todos los gallegos".

Elena Salgado envió esta semana una carta a Quintana para expresarle su negativa a crear la comisión de seguimiento del AVE en el marco de las relaciones bilaterales entre los gobiernos central y autonómico; y el vicepresidente le respondió ayer, también por carta y con declaraciones públicas realizadas en Lugo, que lo que defiende la ministra es "inviable institucionalmente". "No es admisible y no cabe, bajo ningún concepto, una contestación como la de la ministra. No puede faltar al respeto de los gallegos ni vulnerar las normas democráticas", reprochó Quintana, en un acto en Lugo en el que también estaban los conselleiros de Innovación, Fernando Blanco, y de Vivenda, Teresa Táboas.

Frente a la postura de Salgado de que el seguimiento de las infraestructuras debe someterse a un "tratamiento sectorial" porque crear una subcomisión sería "una innecesaria duplicidad", el vicepresidente de la Xunta enarboló el acuerdo unánime de los tres grupos parlamentarios.

En la carta, el dirigente nacionalista advierte a la responsable de Administraciones Públicas de que su propuesta de "relegar" el seguimiento de las infraestructuras al ámbito sectorial "no se ajusta al espíritu de la ley ni a la voluntad expresada por los parlamentos estatal y autonómico". Además, pone en duda que sea viable institucionalmente, ya que no se trata de competencias compartidas, de forma que la relación bilateral debe encuadrarse en la Comisión Estado-Xunta.

"Le voy a dar la oportunidad de rectificar y espero que esa rectificación se produzca inmediatamente", afirmó el vicepresidente de la Xunta.

Acuerdo sano y positivo

En un tono más comedido, Pérez Touriño destacó en un acto oficial en Cerceda (A Coruña) que hay ya una "posición coincidente" de todas las fuerzas políticas gallegas para reclamar la creación de la citada subcomisión y consideró que este acuerdo "en democracia es sano y positivo para todos".

"Galicia tendrá una comisión de seguimiento", garantizó el máximo mandatario gallego, que de todas formas consideró que lo más importante es que las obras de la alta velocidad ferroviaria están en plena ejecución.

Por su parte, el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, coincidió con Quintana en que es una "falta de respeto a Galicia" la negativa de la ministra a crear la subcomisión de seguimiento de las obras del AVE y acusó al PSOE de "boicotear" la iniciativa para controlar la ejecución y los presupuestos de las obras.