Cuarenta científicos gallegos que trabajan en el extranjero se han inscrito en un registro abierto por Gobierno central para facilitar el retorno de investigadores. La falta de oportunidades laborales en España y en Galicia ha provocado una fuga de cerebros hacia otros países, fenómeno que ahora intentan contrarrestar tanto el Ministerio de Educación, que ha creado una oficina con la que pretenden atraer a cerca de 3.000 científicos nuevos, como la Consellería de Innovación que ha encargado al ex rector de Vigo Domingo Docampo que localice y oferte contratos de alta dirección a investigadores de prestigio que trabajan fuera.

Mientras el proyecto de la Xunta aún está en sus inicios, en la oficina creada por el Gobierno central ya hay apuntados 479 científicos españoles, de los cuales 40 son gallegos.

Galicia es la quinta comunidad autónoma con más peticiones de regreso, tras Cataluña (108), Madrid (102), Andalucía (54) y Comunidad Valenciana (51).

La Oficina para el Retorno de Investigadores del Ministerio de Educación se abrió el pasado mes de febrero e incorporó, de entrada, a un total de 425 científicos que se encontraban inscritos en la Red de Investigadores Biomédicos en el Exterior de la Fundación Española de Ciencia y Tecnología. Este registro servía para informar a la comunidad científica de los programas y ayudas de los que se podían beneficiar en España.

De los inscritos, 425 habían mostrado su interés en volver a su país de origen y se incorporaron automáticamente a la Oficina de Retorno, cifra que después se incrementó a los 479 actuales.

La labor de la Oficina para el Retorno de Investigadores del Gobierno central es ofrecer una atención personalizada a los profesionales interesados en regresar a España buscándoles un proyecto y un lugar de trabajo que encaje con la labor que realizaron hasta la fecha y favorezca su regreso en "las mejores condiciones posibles", según los portavoces de la Fundación Ciencia y Tecnología.

Con este fin se les informará de los centros de investigación públicos o privados de los que disponen en España, qué puestos hay adecuados a su perfil y se les asesorará incluso sobre vivienda y colegios para sus hijos.

El Ministerio de Educación baraja incluso la posibilidad de que el investigador no regrese sólo, sino acompañado de su equipo, para que pueda dar continuidad al proyecto de investigación en el que esté trabajando.

Los últimos datos disponibles sobre el número de investigadores que trabajan en Galicia elevan la cifra a 5.191, según las estadísticas del año 2006. Uno de los objetivos marcados por el Gobierno bipartito al inicio de la legislatura era duplicar esta cifra y llegar al año 2010 con una plantilla de 10.000 científicos y tecnólogos contratados tanto en el sector público como en el privado.

Innovación intenta captar a profesionales de prestigio

En Galicia la Consellería de Innovación apuesta no sólo por fomentar el retorno de investigadores gallegos que se han ido a trabajar al extranjero sino que también busca que otros científicos de prestigio elijan centros gallegos para desarrollar su trabajo aunque no sean originarios de esta comunidad autónoma.

Éste es el objetivo del Programa IMAN, que dirige el ex rector de Vigo Domingo Docampo y que inicio su andadura el pasado mes de enero. La Consellería de Innovación lo financia con una partida de 9 millones de euros.

Domingo Docampo asumió las riendas de este programa hace tres meses pero advirtió que no se empezarían a ver resultados hasta finales de año ya que su primera tarea será idear una estrategia para convencer a investigadores altamente cualificados para que trabajen Galicia. Además, deberá contactar con el sector privado y tantear las oportunidades de empleo, ya que la intención es que estos profesionales puedan incorporarse no sólo a la Administración pública sino también a empresas.

De entrada la Consellería de Innovación está dispuesta a financiar contratos de alta dirección en centros tecnológicos y de investigación de excelencia, podrán participar en acciones del Plan Galego de I+D+i y optar a contratos de alto nivel para proyectos de gran alcance.

El objetivo de la Xunta es que en 2010 el 1,5 por ciento del PIB gallego se dedique a I+D.