El PP depende de sí mismo, por eso no le importan los demás partidos. Esto vino a decir ayer en Marbella (Málaga) el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, al señalar que la formación que dirige ganará las elecciones municipales y autonómicas de 2019 "si somos capaces de trabajar" y "de estar con la gente", porque "dependemos de nosotros, de nuestro esfuerzo, de nuestras ganas, ilusión y determinación". Así, se declaró convencido de que el próximo año tendrán un "magnífico resultado" en los comicios municipales.
Rajoy intervino ayer en el acto de presentación de las candidaturas del PP-A a las capitales andaluzas en los comicios locales de 2019. Pero se refirió a más asuntos. Y dos, de candente actualidad. En ambos casos, además, para atacar o azuzar al PSOE.
Por un lado, dejó claro que no quiere un modelo de financiación autonómica "por mayoría, que no lo tenemos", así que espera que el PSOE "dé la talla y, si no, que expliquen por qué no quieren negociar con nosotros".
Por el otro, el jefe del Ejecutivo reclamó a los socialistas que "cambien de criterio" respecto a la prisión permanente revisable, porque su posición "no es comprensible".
"Ahora es el momento de que los militantes del PP reivindiquen el orgullo de ser miembros del mayor y mejor partido de España", subrayó el presidente del Gobierno y del PP.
De igual modo, destacó el trabajo que se desarrolla en los consistorios, y resaltó en que la seña de identidad del PP en todas las instituciones "es siempre la misma, recuperar el rumbo, volver al crecimiento, romper inercias negativas y arreglar lo que otros rompieron o estaban a punto de romper".
Por otro lado, aseguró que los resultados de "los ayuntamientos del cambio", que "son aquellos en los que se cambia en un despacho al alcalde que ha ganado las elecciones", es "sectarismo en estado puro y desgobierno en el más puro sentido de la palabra".
