El Juzgado de Instrucción número 5 de Valencia, que investiga desde 2016 irregularidades en las contrataciones hechas por la Fundación "V Encuentro Mundial de las Familias" con motivo de la visita del papa Benedicto XVI en 2006 a la ciudad, llamará a declarar como investigados (imputados) al expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps (PP); al obispo auxiliar de Valencia Esteban Escudero -también presidente de la citada fundación- y a otras ocho personas más.

Según informó el Tribunal Superior de Justicia valenciano, junto a Camps y Escudero también tendrán que declarar como investigados el exvicepresidente Víctor Campos (PP); el expresidente de las Corts Juan Cotino (PP, director general de la Policía entre 1996 y 2002); el representante legal y la secretaria general de la fundación, Francisco Javier Jiménez y Henar Moliner; y otros dos miembros del patronato: el secretario del Arzobispado, Antonio Ramón Corbí, y Enrique Pérez Boada.

La causa, por delitos de prevaricación, malversación y falsedad, tiene su origen en una pieza separada del "caso Gürtel" de financiación ilegal del PP, en la que se investigan las adjudicaciones por parte de la fundación que organizó la visita papal. Se investiga si esas adjudicaciones se hicieron sin respetar las normas generales de contratación, sin concurso ni concurrencia pública. A estas diligencias se unió una pieza separada del "caso Vaersa" -sobre irregularidades en esa empresa pública-, por lo que también serán llamados a declarar como investigados dos exdirectores de Vaersa, Enrique Simón y Felipe Espinosa Bolaños.

Otras causas

Camps ya está siendo investigado en otros dos procedimientos. El primero, por supuestas irregularidades en la gestión del premio de Fórmula 1 de Valencia. El segundo, por la construcción del circuito para esa competición. Ahora suma esta tercera causa.

La responsable jurídica de los socialistas valencianos (PSPV-PSOE), Ana Barceló, urgió al PP a explicar "de forma urgente" por qué "se utilizó la visita a Valencia de Benedicto XVI y se mercantilizó la fe de los valencianos para ponerla al servicio de intereses espurios". Barceló explicó en un comunicado que "la corrupción del PP era algo más que tres trajes como pretendía hacernos ver Camps; eso era una auténtica anécdota al lado de lo que vamos conociendo día a día".

El síndico de Compromís en el parlamento autonómico, Francisco Ferri, aseguró por su parte que, en el Partido Popular, "se olvidaron del mandamiento 'no robarás'" durante la visita de Benedicto XVI "y no tuvieron ningún escrúpulo en aprovechar la fe de miles de personas que venían a Valencia a ver al Papa para saquear las arcas públicas".

El secretario general de Podemos en la comunidad, Antonio Estañ, afirmó que "se está demostrando que para Francisco Camps no había nada más sagrado que la corrupción". Estañ puso énfasis en que "los personajes de esta película tristemente se repiten una y otra vez en todos los casos de corrupción", por lo que hay que pensar "que el PP era una trama organizada".