La situación política de Murcia entra en una semana decisiva una vez admitida a trámite ayer la moción de censura del PSOE contra el presidente regional, Pedro Antonio Sánchez. También ayer vencía el plazo dado por Ciudadanos al PP para presentar un candidato alternativo al actual jefe del Ejecutivo. "En el PP solo hay un plan y se llama Pedro Antonio Sánchez", afirmó el portavoz de los populares murcianos para descartar la posibilidad de que, dentro del plazo legal de dos días, presenten un candidato alternativo al del PSOE. Ciudadanos apremió al PP a desalojar a Sánchez y ratificó su disposición a respaldar a otro candidato conservador.

La iniciativa de los socialistas coloca al partido de Albert Rivera en una circunstancia complicada por su empeño en que el presidente regional cumpla su compromiso de que en, en caso de ser investigado por presuntas irregularidades en su época de alcalde Puerto Lumbreras, dejaría el cargo, condición con la que C's apoyó la investidura de Sánchez. Ciudadanos rechaza apoyar la moción de censura del PSOE para dar paso a un gobierno en el que también estaría Podemos y defiende la convocatoria de elecciones. Sus representantes murcianos dejaban ayer la puerta abierta a la posibilidad de respaldar al PSOE pero pactando un calendario para la llamada a las urnas.

El PP, en cambio, insiste en esperar a que culmine la investigación judicial del "caso Auditorio", en el que Sánchez aparece como imputado. Tras ser rechazada, por defectos formales, la recusación del juez instructor, basada en su afinidad personal con cargos populares, ayer declararon los peritos. El arquitecto llamado por la Fiscalía, Andrés Checa, sostiene que el Ayuntamiento de Puerto Lumbreras pagó y recepcionó el auditorio sin que estuviera terminado. Sin embargo, uno de los peritos propuestos por Sánchez, Antonio García Herrero, dejó constancia de que solo se contrató la estructura exterior del edificio, no la interior, por lo que se encuentra inacabado.

La cadena SER difundió ayer unas conversaciones desclasificadas por el juez del "caso Púnica", Eloy Velasco, en las que el conseguidor de la trama, Alejandro de Pedro, comenta con un colaborador que tiene listo el contrato para mejorar la imagen de Sánchez, entonces consejero de Cultura. De Pedro indica que cobrará 3.000 euros al mes por esos trabajos y que ya mantuvo encuentros con Sánchez.