El pleno del Congreso ha aprobado este jueves con el apoyo del PP, PSOE y Ciudadanos, y la abstención de Unidos Podemos, ERC y PNV, la reforma electoral destinada a evitar que unas hipotéticas terceras elecciones se celebren el día de Navidad tal y como ocurriría si fracasa una nueva investidura de Mariano Rajoy.

La reforma, que ahora pasará al Senado y que estará aprobada definitivamente antes de que acabe el mes de octubre, reduce de 54 a 47 días el plazo que discurre entre que se convocan las elecciones y la cita con las urnas y deja en ocho días la campaña electoral.

Además, el texto aprobado ha acordado dejar en la mitad el límite máximo de gasto electoral en el que pueden incurrir los partidos durante la campaña, y recortar en un 30 por ciento las subvenciones que reciben las candidaturas por votos y escaños, gracias a un acuerdo de PP, PSOE y C's.

Por contra, en la votación no ha salido adelante una enmienda de Ciudadanos -apoyada por Podemos- que proponía que se hiciera un único envío de las papeletas, ni tampoco una batería de enmiendas de ERC y Unidos Podemos que apostaban por una profunda reforma del sistema electoral, como el derecho al voto a partir de los 16 años.

Unidos Podemos proponía un Congreso con 400 diputados para mejorar la representatividad, suprimir el voto rogado para los españoles residentes en el extranjero y que los ciudadanos de la UE, además de poder votar en las elecciones municipales, pudieran ser elegidos.

Por su parte, ERC reclamaba suprimir la jornada de reflexión, así como la prohibición de publicar encuestas en los últimos días de campaña por ser preceptos "anacrónicos".