"Adolf Hitler tenía razón". Así rezaba la pintada que decoraba ayer un sector de la plaza de toros de la localidad madrileña de Pinto. Acompañada de una esvástica, de la fecha del nacimiento y un dibujo del genocida, la pintada estuvo presente durante las cuatro horas que duró el encierro celebrado con motivo de las fiestas patronales.

El Ayuntamiento del municipio madrileño tuvo constancia de los hechos a primera hora de la mañana, cuando se abrieron las puertas de la plaza de toros. A pesar de esto, las autoridades decidieron dar parte de los hechos y continuar con el encierro con total normalidad.

Según ha declarado la alcaldesa del Partido Popular, Miriam Rabaneda, a través de su cuenta oficial de Twitter "el encierro continuó por motivos de seguridad, para no dar publicidad a indeseables y quienes no tuvieran culpa no se quedaran sin toros".

No fue hasta las 10.30, tras concluir el encierro, cuando los trabajadores de la limpieza borraron la parte afectada del coso y volvieron a pintarla de rojo.

Por el momento, se desconoce la autoría de los hechos aunque la policía municipal de Pinto ha abierto una investigación para dar con el responsable o los responsables de la pintada.

Sobre las 20.30 de ayer se convocó, a través de las redes sociales, una concentración frente al Ayuntamiento como muestra de repulsa a estos hechos.