"La búsqueda continúa y, de momento, no se descarta ninguna hipótesis", dijo hoy a Efe un portavoz de la Gendarmería, que precisó que el dispositivo de alerta se ha ampliado más allá del departamento de Nièvre, en el centro del país, donde los dos presuntos etarras se dieron a la fuga.

La alerta está vigente también en los departamentos limítrofes, añadió el portavoz tras insistir en que, de momento, se trabaja con "varias hipótesis" sobre el posible paradero de los fugados.

Las fuerzas de seguridad galas sospechan de que se trata de dos presuntos etarras porque encontraron documentación escrita en euskera en el coche, con matrícula falsa, que abandonaron después de sufrir un accidente.

Anteriormente, habían repostado gasolina en una estación de servicio de Saint Honoré-les-Bains, de la que huyeron sin pagar, lo que desencadenó una búsqueda por parte de la Policía, en la que se pudieron producir disparos.

Sin embargo, no hay confirmación oficial de que se diera un enfrentamiento entre los presuntos terroristas y las fuerzas de seguridad francesas.