El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseveró ayer que España va a salir de la crisis, porque "no nos vamos a quedar sentados esperando a que llegue la recuperación" y porque "vamos en un barco sólido que conoce muy bien su rumbo", a pesar de que la "tempestad es fuerte". Zapatero compareció ayer, tras el último Consejo de Ministros de 2008, para hacer balance de los ocho primeros meses de esta legislatura, que comenzó en marzo pasado.

Según el jefe del Ejecutivo, el Gobierno destinará todos los recursos públicos posibles para afrontar el año "difícil" que será 2009, en el que la "tarea prioritaria" y el "único horizonte" será la recuperación económica.

El Gobierno se va a "anticipar" a la crisis y estará en el grupo de países que antes lo conseguirá por haber tomado las medidas adecuadas y por tener recursos que, "por desgracia, otros no tienen", pronosticó.

En su opinión, esto no es "optimismo, sino realismo", por lo que rechazó las "recetas anticrisis" como la contención del gasto, los "sacrificios" salariales, el facilitar el despido o aplicar recortes de los servicios públicos.

Inversión pública

Por contra, recordó, el Gobierno ha apostado por aprobar medidas de ayuda a las familias, por incrementar el gasto público y por inyectar liquidez y fortalecer los mecanismos del sistema financiero para que el dinero llegue a las empresas y a los ciudadanos y "resguardar" los depósitos éstos últimos de "posibles turbulencias". Así, indicó que entre 2008 y 2009 los contribuyentes y los empresarios dejarán de pagar 16.000 millones de euros en concepto de IRPF y del Impuesto de Sociedades, mientras que la supresión del Impuesto de Patrimonio supondrá un ahorro de 1.800 millones de euros para las familias.

En cuanto a la inversión pública, destacó que en 2009 ascenderá a 33.000 millones de euros, de los que 22.000 ya están comprometidos en los Presupuestos Generales del Estado y 11.000 millones saldrán del Plan Extraordinario de Inversión aprobado por el Gobierno (de los que 8.000 millones son para el Fondo Especial de Inversión en Ayuntamientos).

De este fondo para financiar las obras en las entidades locales, anunció que, hasta ayer, el Ministerio de Administraciones Públicas recibió 2.200 proyectos, por importe de 1.000 millones, de los que ya se han aprobado 700.

Para Zapatero el ritmo es "excelente", por lo que se cumplirán las "expectativas" de invertir los 8.000 millones y a finales de marzo todas las obras de los ayuntamientos estarán a "pleno rendimiento", lo que permitirá crear 220.000 empleos directos, a los que habrá que sumar, precisó, los indirectos.

"En momentos difíciles los principios del Gobierno, solidaridad y protección social, son más necesarios que nunca", afirmó Zapatero.

De la evolución del empleo aseguró que en los próximos meses seguirá la destrucción de puestos de trabajo y que la "esperanza razonable" es que en la "segunda mitad" del año cambie, aunque "los ciudadanos deben saber que estamos viviendo los momentos más difíciles y graves".

Zapatero defendió además las medidas que ha ido adoptando el Gobierno desde el inicio de la crisis económica internacional, que situó en septiembre de 2007, hasta la reciente llegada del "fantasma de la recesión".