Lluc Tomàs, el alcalde del PP en la localidad mallorquina de Llucmajor que el lunes fue condenado por la Audiencia Provincial a tres años de prisión por un delito de malversación de fondos públicos presentó ayer su dimisión como primer edil en el Consistorio, así como su baja voluntaria en la sede del PP regional. Sin embargo, el ahora ex alcalde defendió su inocencia asegurando que nunca se llevó dinero del Ayuntamiento de Llucmajor y que, de haber sabido que alguien sí lo hacía, "lo hubiese denunciado". Por su parte, el PP le agradeció "su gesto" de darse de baja del partido para "no dañar la imagen de su grupo político mientras dure su legítima defensa".

Ayer, Lluc Tomàs hizo efectiva su baja como primer edil de Llucmajor mediante un escrito que fue entregado en el el Ayuntamiento, dejando constancia de su dimisión. Además, y tal y como comunicó a la Junta Local, también hizo efectiva su baja en la sede regional del PP, partido que expresó su "total convencimiento" en la inocencia de Tomàs. La formación le agradeció "su gesto de hombre del PP, que decide causar baja temporal para no dañar la imagen de su grupo político mientras dure su legítima defensa".

La Audiencia de Palma de Mallorca condenó a Tomàs a tres años de prisión e inhabilitación durante ocho años por un delito de malversación de caudales públicos. La Fiscalía solicitaba hasta ocho años de prisión para el alcalde, al que acusaba además del delito de malversación de caudales públicos.

El ex alcalde, acompañado del presidente del PP en Mallorca, Pere Rotger, pidió "disculpas" a los que han depositado su confianza en él y subrayó que no les "defraudará", porque el Tribunal Supremo le dará la oportunidad de "limpiar" su imagen.