-Da la sensación de que parte de los seguidores del PP se quedaron en casa, en las anteriores elecciones, porque muchos son personas mayores, lo que se suma a la apatía...

-Esa ha sido una de las claves. Pero además de eso, había otro espacio, donde el concepto de novedad estaba ahí. No se había contrastado lo que podía dar de sí cada partido. La ventaja que tenemos ahora, es que estos seis meses nos han permitido conocer el pensamiento y el comportamiento de cada uno de estos partidos. Esa es la clave. El candidato de Ciudadanos, Albert Rivera, parecía que era un señor, hablaba de un centro derecha, y acabó pactando con el PSOE.

-¿El tema económico, constituye la tarjeta de presentación del PP?

-Efectivamente, la gente no puede tener la memoria tan frágil. El gobierno de Rodríguez Zapatero ha dejado a España al borde del rescate. La prima de riesgo estaba por las nubes, por lo que no encontraba financiación con facilidad y tenía que pagar unos intereses insoportables. El PSOE dejó el gobierno en 2011 por la puerta de atrás, como quien dice escapando. Todo el mundo estaba presionando para que el presidente del Gobierno pidiera el rescate. Y como se ha visto, ha sido un acierto no pedirlo. En estos momentos España constituye un ejemplo, y se encuentra a la cabeza del crecimiento económico. La dinámica ha cambiado por completo. En aquel momento perdíamos mil y pico puestos de trabajo cada día, y ahora se están creando.