Nacido en Barcelona en 1980 pero residente en Vigo, Antonio Lara se encaramó al primer puesto de la lista de Ciudadanos por Pontevedra casi de rebote. Licenciado en Derecho por al Universidade de Santiago, trabaja en una compañía de seguros y está especializado en Derecho Mercantil. "Soy un chaval de Vigo que cree que la sociedad merece un cambio a mejor", asegura.
A sus 35 años, carece de experiencia política. Antes de embarcarse en el proyecto de Albert Rivera no participaba en ninguna otra formación. Se afilió a Ciudadanos a finales de 2013, cuando el partido comenzó a promocionarse fuera de Cataluña. Dice que Rivera la gustaba ya desde hace tiempo por su formas de hacer política en Cataluña y que cuando la marca decidió extenderse por el resto de España fue cuando dio el paso para involucrarse directamente. "Ciudadanos es mi primer amor político", asegura.
Él mismo reconoce que su experiencia en primera fila es más bien escasa. Quizás por eso rehúye los focos mediáticos.
Su primer asalto fue concurrir a las últimas elecciones municipales en Vigo. Fue de número cinco. Y ahora el reto es acceder al Congreso. Según la encuesta del CIS, puede hacerlo. No se lo esperaba ni él, dado que optaba al tercer puesto. Pero debido a la renuncia el cabeza de lista elegido en primarias y a que el sustituto se cayó justo en el último minuto sin que desde la formación se explicaran los motivos, el partido de Rivera lo ascendió al liderazgo de la candidatura por la provincia de Pontevedra.
Practica una gran variedad de deportes, el hockey sobre hierba entre ellos, y acude regularmente al gimnasio. Fue árbitro de joven para sacarse unos recursos adicionales. No participa con ninguna ONG. Casado y sin hijos, la gusta casi toda la música actual y pasear por el centro de Vigo con su esposa cuando tiene tiempo.
