El portavoz de En Marea y diputado electo, Luís Villares, se ha reafirmado este jueves en que el reparto de la Mesa del Parlamento debe ajustarse a los criterios de "pluralidad" y "proporcionalidad" según los resultados de las urnas del 25 de septiembre, pero también ha defendido una composición de este órgano "los suficientemente amplia" para que "todos los grupos" estén "representados".

"A partir de la semana que viene vamos a intentar ese vector fundamental", ha esgrimido, en declaraciones a los medios, tras acudir al registro con el resto de miembros que compondrán el Grupo Parlamentario de En Marea a presentar las credenciales para la X Legislatura.

Y es que el Pazo do Hórreo ha albergado en los últimos días los primeros contactos entre los grupos para el reparto de los puestos institucionales de la Mesa, órgano rector de la Cámara, que deberá quedar constituido en la sesión del 21 de octubre, si bien por el momento tienen carácter "embrionario" y la composición no quedará cerrada hasta la semana que viene.

En relación a esta cuestión, Villares ya había avanzado que, como segunda fuerza gallega en votos, En Marea "hará valer" esa posición, ya que entiende que debe ser atendido el principio de la "proporcionalidad" y contar con un puesto fijo para toda la legislatura, aunque ha rechazado anticipar "nombres" para ocupar dicho cargo "a la espera de que haya unos canales de negociación abiertos" y se "pacte" un reparto de responsabilidades según la "pluralidad y proporcionalidad".

Sin embargo, En Marea consideraría positivo que el BNG también pudiese estar en la Mesa. En este sentido, Villares ha vuelto a insistir este jueves en la idea de que sería necesaria una composición "lo suficientemente amplia" para que "todos los grupos" puedan estar representados.

"Lo que dijimos es que vamos a intentar que la composición sea lo suficientemente amplia para que, respetando la proporcionalidad, todos los grupos puedan estar representados. En el proceso de diálogo que abriremos a partir de la semana que viene, vamos a intentar ese vector fundamental", ha asegurado.

En cuanto a los lugares a ocupar en el hemiciclo, una cuestión que los representantes de las distintas fuerzas ya trataron el lunes con el presidente del Parlamento, Miguel Santalices, Villares ha defendido que no habrá "ninguna disputa". "Somos la segunda fuerza y eso da lugar a una determinada composición del hemiciclo", ha subrayado.

La semana que viene se cerrará el reparto

Fuentes de las diversas fuerzas que conforman el arco parlamentario gallego han confirmado a Europa Press los primeros contactos en relación al reparto de la Mesa. De hecho, este mismo jueves se produjo un encuentro entre el portavoz de En Marea y diputado electo, Luís Villares, y el socialista Xoaquín Fernández Leiceaga. Villares también ha tenido la oportunidad de saludar al popular Pedro Puy.

En todo caso, estos contactos adquieren por el momento un carácter informal y no se profundizará en el diálogo hasta la semana próxima, a la espera de que los socialistas ratifiquen a su portavoz (puesto para el que previsiblemente la gestora propondrá a Leiceaga) y también de que el PPdeG 'oficialice' si Pedro Puy sigue en el cargo que ocupa desde que relevó a Manuel Ruiz Rivas en 2011.

El reglamento estipula que, tras la constitución del Parlamento, la primera decisión que adoptará el pleno es la elección de los miembros de la Mesa. El presidente, puesto que se elige por mayoría absoluta, lo señalará el PP.

Posteriormente se eligen el resto de los nombres del órgano rector de la Cámara en otras votaciones. En este caso, lograrán los puestos de vicepresidente primero y secretario los más votados para cada uno de estos asientos en las respectivas elecciones entre diputados, lo que significa que automáticamente irán para el PPdeG por su mayoría absoluta.

A la espera de que se concreten las directrices en el Grupo Popular, lo previsible es que el PPdeG asuma los tres puestos que le garantizan la mayoría absoluta en la Mesa --y que ocupaban hasta ahora Miguel Santalices (presidente del Parlamento), Marta Rodríguez Arias (vicepresidenta primera) y José Manuel Balseiro (secretario)-- y se no interfiera en los dos restantes.

Necesidad de acuerdo

La vicepresidencia segunda y la vicesecretaría recaerán en los segundos más votados, por lo que en este caso sí será necesario el diálogo entre las fuerzas, ya que si cada grupo votase a su propio candidato, el BNG (con seis diputados) quedaría fuera y habría empate en el número de votos PSdeG y En Marea.

El reglamento determina que, para solucionar esta cuestión, se harán votaciones sucesivas hasta que se solvente el problema, lo que obligaría a otro grupo a decantarse por una de estas dos fuerzas, salvo que En Marea y PSdeG acuerden repartirse un puesto cada uno ya de antemano y apoyarse mutuamente.

Voluntad de diálogo

Por otra parte, a las puertas del arranque del nuevo mandato, Luís Villares ha subrayado la voluntad de diálogo de En Marea y su intención de buscar "acuerdos" con el resto de grupos políticos, aunque ha admitido que "la mayoría absoluta del PP tal y como se llevó a cabo en anteriores legislaturas va a hacer difícil cierto trabajo parlamentario".

Dicho esto, "haya o no mayorías absolutas o acuerdos, que se buscarán", ha reivindicado que el "empeño" de En Marea es "trabajar en la calle, con la gente" y ejercer "de la voz de la ciudadanía en el Parlamento.