La constructora ourensana Copasa mejoró su resultado un 51% en 2016, al pasar de un resultado consolidado de 5,59 a 8,48 millones, según las cuentas anuales auditadas remitidas al Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF). El incremento del beneficio contrasta con una caída en la cifra de negocios, que se contrajo en un 20% (376,6 millones) debido principalmente a una menor actividad en las obras del tren de alta velocidad de Medina a La Meca. Copasa es la única firma gallega integrada en el consorcio Al Shoula, del que forman parte también Renfe, Adif o Indra, para una obra de 7.000 millones de euros. Por este motivo Oriente Medio ha quedado relegado al tercer puesto de los mercados por facturación; México emerge con fuerza y, con ingresos de más de 80 millones, es ya el segundo país más importante para la firma gallega.
La actividad en este territorio está agrupada en torno a Caltia Concesiones, grupo que aportó por sí solo a la constructora un beneficio superior a los 3,5 millones, únicamente por detrás del generado por la propia matriz. Para Copasa "es la muestra de que consolidar el posicionamiento" en los países donde está ya asentada "es uno de los objetivos prioritarios". Prevé culminar en agosto el proyecto de ampliación natural del puerto de Veracruz, con un dique rompeolas de 4,2 kilómetros de longitud. El presupuesto de la obra, adjudicada en 2014, es de 115 millones de euros. En el mismo país la ourensana se adjudicó a finales del año pasado la modernización y ampliación de la carretera Estación Don-Nogales, que comprende la construcción de 28 kilómetros de vía. La infraestructura recibió financiación del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) del Gobierno estatal de Enrique Peña Nieto.
"El peso del negocio internacional ha sido clave", destaca la compañía en su informe de gestión, y de cara al futuro apuesta por "consolidar su posicionamiento" fuera de España. A cierre de año el 64% de la cartera de proyectos cerrada de Copasa, de 1.258 millones, correspondía a contratos en el extranjero. No obstante, fue una filial del exterior (la brasileña Empreendimentos Corporate Ltda.) la menos rentable al arrojar un resultado negativo de 3,7 millones de euros, muy por encima de las pérdidas de 774.000 euros del ejercicio anterior. En este sentido Copasa decidió transmitir a "un tercero" la totalidad de su participación en Copasa Brasil Constructora Ltda, que "estaba totalmente deteriorada". En paralelo constituyó una sociedad del mismo nombre pero con el formato de sociedad anónima, del que posee ahora el 50,01% del capital. La compañía presidida por José Luis Suárez persevera en el país sudamericano, donde ejecutará las obras de mejora del abastecimiento de Belém. La actual infraestructura de esta ciudad sufre pérdidas de agua de hasta el 75%.
