Un mercante de 400 metros de eslora y cargado con 390.000 toneladas de mineral de hierro puso por primera vez a prueba las maquinillas de amarre construidas por la viguesa Ibercisa para la nueva terminal de carga de la brasileña Vale do Río Doçe. La infraestructura Pier IV Norte está en São Luis do Maranhao y tiene como cometido el envío de materia prima a China a bordo de los mayores mercantes del mundo. El buque Ore Dongjiako completó la maniobra de carga esta semana, ayudado por la tecnología de la auxiliar del naval. "Fue uno de los momentos más esperados por el proyecto S11D Offshore desde el inicio de su construcción", destacó la multinacional, que firmó este año un macropedido de 8.000 millones de mineral de hierro a entregar en China durante 30 años.

Para la Pier VI Ibercisa diseñó, fabricó y puso en marcha 26 maquinillas de amarre y 50 fairleds (alavantes o guíacabos), su mayor proyecto hasta la fecha, que aspira ahora a repetir gracias al contrato de tres décadas entre Vale y un fonso soberano asiático. Las maquinillas hidráulicas permiten que los cargueros puedan realizar las maniobras de aproximación, atraque y carga con mayor seguridad. Sin un sistema como el diseñado por Ibercisa los buques de la clase Valemax (VLOC, Very Large Ore Carrier) podrían arrancar el muelle sin dificultad. La ubicación en São Luis do Maranhao es óptima a nivel logístico y ofrece un gran calado a los cargueros (de hasta 23 metros cuando están cargados y de 12 en lastre), pero las condiciones son extremas: mareas superiores a los siete metros, grandes corrientes y vientos fuertes. Los barcos deben completar la carga en un máximo de 42 horas.El anclaje de las maquinillas (un plug and play,colocar y usar) requirió de 26 pernos embebidos a la cimentación o con anclaje químico. El sistema de la compañía viguesa alcanza velocidades entre 25 a 51 metros por minuto en velocidad rápida, y cinco a diez metros por minuto en velocidad lenta a plena carga. Un segundo buque Valemax efectuará la misma maniobra esta semana.