Los concesionarios de coches despedirán el año en España con una facturación superior a 35.000 millones de euros, un 25% más que en 2015, un dato con la que el sector logra "aparcar" la crisis pero "no enterrarla", según anunció ayer el presidente de la patronal de concesionarios (Faconauto), Jaume Roura. Si se extrapola esta cifra a Galicia, el sector cerrará 2016 con unos ingresos por encima de los 1.500 millones de euros, frente a los 1.220 millones del año pasado, cuando los concesionarios gallegos crearon medio centenar de empleos tras años de duros ajustes.
Roura, que pronosticó que en 2017 la facturación volverá a crecer hasta los 37.000 millones pese a la no renovación del Plan Pive, calificó de "positivo" el balance de 2016 por ser de "estabilización" pero recordó que en los últimos años la crisis económica y financiera ha provocado el cierre de 1.300 concesionarios, más de sesenta en la comunidad gallega. El presidente de Faconauto explicó que las matriculaciones este año "han acompañado" y la previsión que manejan desde el sector es acabar el ejercicio con 1.157.000 unidades (de las que 274.000 serán todoterrenos), el 12% más que un año antes.
A esa cifra Roura sumó 173.000 unidades de comerciales ligeros (un 12% en tasa interanual), con lo que la cifra total será de 1.330.000. Para el presidente de Faconauto supone alcanzar "la tan ansiada velocidad de crucero" que necesitan los concesionarios en España para ser rentables. La rentabilidad alcanzará a finales de 2016 "el entorno del 1,5%", aunque aún están "muy lejos del objetivo deseado y necesario, que debe situarse en una media del 3%", matizó. En cuanto a 2017, destacó que la previsión es que las matriculaciones asciendan a 1,2 millones (un 5% más que en 2016) y que ese número se repita en 2018.
El portavoz de Faconauto insistió en que la finalización del Plan PIVE, que estaba representando el 10% de las ventas a particulares, no ha contribuido al crecimiento de las matriculaciones, que hubieran llegado a 1,2 millones de unidades de contar todo el año con el programa. En esta línea, aseguró que los concesionarios y las marcas han puesto todos sus esfuerzos para continuar motivando al comprador a cambiar su automóvil, aportando descuentos de más de 4.000 euros por coche.
Desde Faconauto -apuntó Roura- están trabajando y trasladando al Gobierno la necesidad de poner en marcha un nuevo plan de renovación del parque que incentive la retirada de coches antiguos menos seguros y más contaminantes, lo que debe ser uno de los grandes objetivos para 2017. "Esperamos y deseamos que el Gobierno entre en razón y comprenda la necesidad de estos programas que fomentan la renovación de un parque automovilístico antiguo y también conllevan una mejora importante del medio ambiente", subrayó Roura.
En Galicia, la reestructuración del sector fue intensa hasta 2015, año en el que las ventas ya crecieron un 11,5%, hasta los 1.220 millones de euros (se entregaron 39.000 vehículos), y se crearon 500 puestos de trabajo (de un total de 9.561 nuevos empleos en España), según los datos de la memoria de Faconauto. En Vigo, hubo una concentración del negocio y se recuperaron marcas históricas, como Ford.
