El expediente de regulación de empleo (ERE) planteado por Banco Popular -grupo al que en Galicia pertenece el Pastor- afectará en la comunidad gallega a 298 trabajadores de los 370 que se sumaron voluntariamente al ajuste planteado por la entidad financiera. El plazo para las adhesiones concluyó el pasado sábado con 370 empleados gallegos dispuestos a acceder a las bajas voluntarias, pero en algunos grupos de edad se superó el cupo máximo fijado por el banco, por lo que, tras ajustar las cifras a los límites impuestos, los afectados en la comunidad se reducen a esos 298 profesionales.

En el conjunto del Estado las bajas voluntarias ascienden a 2.637, una vez descontados los que excedían los cupos, de un total de 2.977 trabajadores del Popular que estaban dispuestos a abandonar la entidad. Por comunidades, la que sumó más voluntarios a dejar el banco -antes de eliminar esos excesos de los cupos- fue Madrid, con 685, seguida de Cataluña (477), Andalucía (438) y Galicia (370).

El Popular cuenta en la comunidad gallega con casi 1.800 empleados -1.300 en el Pastor y unos 500 en la matriz- y con una red comercial de 259 oficinas, 30 del Popular y 225 pertenecientes al Pastor.

La entidad financiera que preside Ángel Ron planteó inicialmente que el ajuste laboral que su reestructuración afectase a unos 450 trabajadores en Galicia, el 15% del total -casi 3.000 personas- en España, pero estas cifras fueron bajando hasta unos 2.592 empleados para el conjunto del Estado, unos 400 en Galicia según las estimaciones de los sindicatos.

La integración de Pastor y Popular ya significó en 2012 un importante proceso de ajuste, con prejubilaciones y traslados que se saldaron en unas 800 salidas.

En toda España, 2.977 trabajadores solicitaron la baja voluntaria en el ERE del Banco Popular. Si se descuenta el exceso en aquellos colectivos que tenían cupo, la cifra de adhesiones efectivas se sitúa en esos 2.637 empleados.

El banco aseguró que el periodo de adhesiones voluntarias se cerró "con rotundo éxito", al haber excedente en aquellas categorías que contaban con cupo. "El acuerdo ha cumplido con los compromisos adquiridos por la entidad en la ampliación de capital, dentro de los plazos previstos, mediante el diálogo permanente y con el consenso de los sindicatos", indicó la entidad financiera.

En concreto, un total de 1.621 personas se adscribieron a las bajas voluntarias en el grupo de trabajadores de 59 años o más a 31 de diciembre de 2016, el 98% de los trabajadores en edad de prejubilación. Mientras, un total de 284 trabajadores de hasta 58 años a 31 de diciembre de este año se acogieron a la baja, el 90% de los empleados pertenecientes a ese grupo, que estaba limitado a 200 personas.

Dentro del grupo de trabajadores de entre 55 y 57 años, un total de 356 personas optaron por la baja voluntaria, lo que representa el 61% de los profesionales del banco en este grupo de edad. El cupo máximo fijado por la entidad era de 100 empleados.