El Grupo Banco Popular ha rebajado en casi 400 el número de personas que se verán afectadas por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que cifra ahora en 2.592. La dirección del banco mantuvo ayer con los sindicatos una nueva reunión del periodo de consultas en la que, además de reducir las bajas, ha mejorado las condiciones de salida de las mismas. En Galicia dejarán de trabajar para el grupo (con oficinas tanto del Popular como del Banco Pastor) unas 390 personas, el 15% del total, frente a las 435 de la anterior propuesta. La primera fase del ERE, cuya ejecución se culminará antes de julio, es de adscripción voluntaria.

Las personas mayores de 59 años (son casi 1.700, según los datos de la entidad) percibirán el 80% del salario neto anual, con la Seguridad Social a cargo del empleado hasta los 63 años (es la edad que se fija para la jubilación en este proceso) y una prima de adscripción voluntaria de 5.000 euros. La misma gratificación se ofrece para los nacidos en 1958 (58 años), además del 75% del salario anual. En este caso solo se podrán inscribir 120 personas. Los empleados de entre 55 y 57 años podrán ingresar el 70% del salario, también con prima de adscripción, con la Seguridad Social a su cargo hasta los 63 años. Esta oferta está acotada a 80 personas. La propuesta inicial fijaba la pensión máxima de prejubilación en el 75%.

Para el caso de los trabajadores menores de 55 años (ya sin oferta de prejubilación), la entidad ha elevado la propuesta de indemnización. Los que tienen entre 50 y 54 años percibirán un finiquito de 33 días por año trabajado con 20 mensualidades de tope (frente a los 30 días y 18 meses de la anterior propuesta). Los menores de 50 años tendrán derecho a ingresar una indemnización de 30 días y 18 mensualidades (antes era de 28 días y tope de 15 meses). El Popular incluye además la posibilidad de que 125 adscritos al ERE de forma voluntaria puedan retornar al banco en un periodo de tres años prorrogables a un cuarto.