Después de meses de intensas negociaciones, el Grupo PSA y el fabricante iraní SAIPA, antiguo socio de la multinacional francesa, podrían firmar el acuerdo definitivo para el retorno de la marca Citroën al país a principios del próximo mes de octubre, según ha podido saber FARO. Al frente de esta nueva joint-venture estará el actual director de la factoría de PSA-Vigo y del Polo Ibérico del consorcio galo, Yann Martin, que tendrá poder ejecutivo tanto a nivel industrial (para la puesta en marcha de una nueva fábrica) como comercial en un país en desarrollo de casi 80 millones de habitantes. La previsión que maneja PSA para esta alianza es de unos 150.000 coches anuales. La inversión prevista, compartida al 50% por los socios (PSA y SAIPA), será de unos 300 millones de euros. El grupo prevé que los mercados de África y Oriente Medio generen un volumen de ventas conjunto de 8 millones de unidades a partir de 2025, y aspira a vender un millón de coches. Además de en Irán, el consorcio está trabajando en la puesta en marcha de una factoría en la zona franca de Kénitra en Marruecos y otra en Argelia y cuenta con centros de ensamblaje en Nigeria y Etiopía.