"Algérie Ferries tiene el placer de anunciar la finalización del encargo del nuevo ferri con el astillero Hijos de J. Barreras". De esta forma confirmó el pasado viernes la naviera argelina, propiedad de la compañía pública ENMTV (Entreprise Nationale de Transport Maritime de Voyageurs), la adjudicación de un buque ro-pax (que combina el transporte de carga rodada y pasajeros) a la factoría naval viguesa, como avanzó el jueves su presidente, José García Costas. Algérie Ferries, a través de sus cuentas oficiales en las redes sociales, también publicó un cartel en el que deja entrever algunas características del que será el quinto ferri de su flota. García Costas cerrará hoy los detalles del acuerdo con directivos de ENMTV en el país norteafricano.

La flota actual de Algérie Ferries está compuesta por los buques El Djazair II, Tariq Ibn Ziyad, Tassili II y Ariadne, que cubren diversas rutas por el Mediterráneo. El nuevo ferri que construirá Barreras, y que será entregado "en el transcurso de 2016", según la naviera, será el de mayor capacidad de todos, según el pliego del concurso, para 700 coches y 2.000 pasajeros. La licitación de ENMTV sufrió varios retrasos debido a complicaciones en el proceso, que obligaron a repetir al menos dos veces la presentación de ofertas, como avanzó este periódico. A la fase final del concurso llegaron dos factorías navales: Barreras y un grupo turco que a priori habría logrado mejor puntuación, pero que finalmente fue descartada por la firma pública argelina.

La cartera de pedidos de Hijos de J. Barreras está formada por el flotel de Pemex, en construcción (en la obra trabajan ya 517 personas), y un atunero para la armadora Procesa, de Chiapas, cuyo contrato está pendiente de entrar en vigor a la espera de una licencia de pesca. A mayores, pendiente de confirmación, el astillero vigués concursa para recibir tres buques tanque para la petrolera mexicana y mantiene negociaciones avanzadas con diversos armadores. Mañana 16 de diciembre hará justo un año que Pemex oficializó su toma de control de Barreras, con la celebración en Vigo del primer consejo de administración del astillero con presencia de directivos mexicanos. Entonces se anunciaron cinco contratos, de los cuales solo se cerró -aunque no entró en vigor- el atunero de Procesa.