Al Gobierno sólo le quedaba presentar unas cifras de paro como las de ayer para reafirmarse en su argumentario de que la crisis ha empezado a pasar a la historia. Por primera vez desde que estalló la crisis, allá por septiembre de 2008, España crea empleo. Fue el primer febrero en que baja el paro en España desde 2007. Lo hizo en 1.949 personas, un 0,04% respecto a enero, aunque en comparación con los datos de un año atrás, el descenso es del 4,52%, con lo que el país reduce su número de desempleados en 227.736 personas, hasta las 4.812.486. Pero además es la primera vez desde mayo de 2008 en que la afiliación a la Seguridad Social aumenta respecto a las cifras de hace un año. En España cotizan 38.694 personas más que en enero y 61.557 más que hace doce meses y aunque en los dos casos es un incremento ligero -inferior a un 1%- y que el número total de cotizantes sigue en niveles mínimos (16.212.304), significa que el país crea empleo.

También fue el mejor febrero en siete años para Galicia, como destacó la Xunta, donde 1.006 personas abandonaron las listas del Servicio Público de Empleo, una caída del 0,36%, superior a la media nacional. El descenso es mucho mayor en comparación interanual: 12.752 gallegos dejaron de ser demandantes de empleo, un retroceso del 4,35%, en línea con el promedio nacional, hasta los 280.071 desempleados que suma la comunidad.

Galicia contaba hasta el pasado viernes con 902.990 cotizantes, 1.613 más que en enero pasado, pero 6.299 (-0, 69%) menos que doce meses atrás, lo que contrasta con la una caída del desempleo en ese periodo de 12.752 personas. Los sindicatos siempre han atribuido estos desfases entre el paro y la afiliación al desencanto de quien sigue en paro y no demanda empleo oficialmente, el regreso a las aulas y, sobre todo, la emigración.

El 45% de parados, sin paga

La afiliación gallega amenaza con perder el nivel de los 900.000 cotizantes en una comunidad donde ya son más las familias que viven de una pensión o una prestación de desempleo que de un salario, como ayer adelantó este periódico. Y sólo el 55% de los parados gallegos (154.129) percibe algún tipo de prestación.

En el último mes y en el último año, el paro bajó en las cuatro provincias. A Coruña encabezó el descenso interanual, al absorber la mitad de la caída gallega (con 6.220 parados menos, un 5,38%), seguida de Ourense, donde el número de desempleados se redujo un 4,41% (-1.408); Lugo (-3,65% y 1.082 parados) y Pontevedra (-4.042 desocupados menos, un 3,4%). En comparación con enero, el desempleo se redujo por encima del medio punto porcentual en las provincias interiores y por debajo en las atlánticas, pero en números redondos, A Coruña fue la que tuvo un mejor comportamiento, (406 parados menos), seguida de Lugo (-225), Pontevedra (-221) y Ourense (-154).

Por sectores, sorprende el comportamiento de la construcción, donde el desempleo se redujo en un año en 6.010 personas (-12,6%), aunque es el único sector donde el paro aumentó el mes pasado. Porcentualmente le siguen el colectivo sin empleo anterior (-5,8% en un año y 1.342 parados más); la industria (-5,56%, 2.285 desempleados menos) y los servicios (-1,93% y 3.311 parados menos). El desempleo avanza en el sector primario, un 2% desde febrero de 2013.

Las cifras revelan que quienes más abandonan las listas del SEPE son los titulados universitarios, segmento que registra las mayores caídas del paro interanual (-6,75%) e intermensual (-2,11%). Galicia tiene 7.271 parados de hasta 30 años menos que hace un año (-13,71%) y 6.982 desocupados menos de entre 30 y 44 años (-5,85%). El desempleo aumenta un 1,25% entre los mayores de 44, que ya suman 122.000, el 43% de todos los parados gallegos. Por tiempo de búsqueda de empleo, el desempleo cayó más entre quienes llevan entre seis meses y un año parados (-17% en los últimos doce meses).