La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha insistido en que, gracias a la reforma laboral, en 2012 se han perdido 400 empleos menos cada día en comparación con los cuatro años anteriores de crisis.

En la sesión de control al Gobierno del Congreso, la ministra ha respondido así a la diputada del PSOE Pilar Lucio Carrasco, quien le ha preguntado a Báñez si mantiene esa afirmación, ya que supone "enmascarar una dura realidad" y "tratar de engañar a la ciudadanía", de la que ha dicho que ya no se cree al PP.

Según Carrasco, los "grandes éxitos" que está teniendo la reforma laboral en su primer año de funcionamiento son 850.000 empleos destruidos, una rebaja salarial encubierta y un contrato libre con un despido más barato, en referencia al de emprendedores con una plantilla inferior a los 50 trabajadores.

La diputada también ha recordado a la ministra que cuando accedió al cargo se encontró con el "mejor patrimonio" que ha tenido cualquier titular de Empleo, en referencia al acuerdo de empleo y competitividad que firmaron el 25 de enero de 2012 las patronales CEOE y CEPYME con los sindicatos CCOO y UGT.

Al respecto, ha indicado que Báñez lo "desaprovechó o no le interesó", por lo que le ha emplazado a que siga el camino de sus compañeros en el Consejo de Ministros y rectifique "desde la honestidad".

Fátima Báñez le ha replicado que, en 2012, el Gobierno "ha cerrado los agujeros" que dejó el PSOE de más de 90.000 millones de euros en concepto de déficit y ha puesto en marcha un programa de reformas para el crecimiento y el empleo.

De la reforma laboral ha destacado que ha servido para mantener "muchos" puestos de trabajo y para que haya 400 parados menos cada día.

Sin embargo, ha precisado que no están contentos con los resultados, porque hay muchos españoles sin empleo y sin oportunidades.

Como datos "reales y hechos ciertos" también ha enumerado que la reforma laboral ha servido para ganar competitividad, credibilidad y confianza en la salida de la crisis.

Asimismo, ha contribuido a atraer inversión en forma de miles de empleos a través del sector del automóvil y para que, a través de medidas de flexibilidad interna, se hayan cambiado las condiciones de trabajo y no haya habido tantos despidos.