La multinacional estadounidense Johnson Controls trasladará la producción de su planta de Redondela (la antigua Unitexga) a la factoría que tiene en Pitesti, Rumanía, según confirmaron responsables de la empresa al comité. Representantes de los trabajadores y la multinacional mantuvieron ayer la primera de las reuniones fijadas para intentar llegar a un acuerdo respecto al cierre de las instalaciones redondelanas, en las que trabajan más de doscientas personas entre personal propio y contratado a través de ETT. Al cierre de esta edición aún no se había llegado a ningún acuerdo.

La dirección del grupo exige como condición para negociar que la plantilla permita la salida de material de la planta redondelana, que confecciona forros textiles para reposacabezas y asientos de vehículos, y cuyo único cliente es el grupo Volkswagen. Sin embargo, los trabajadores mantendrán el bloqueo hasta que se llegue a un acuerdo. La plantilla exige el mantenimiento de los puestos de empleo, pero la empresa solo está dispuesta a recolocar a cierto personal entre otras plantas del grupo en España y a formar al resto de los empleados para que puedan encontrar otro trabajo.

El grupo americano anunció anteayer el cierre de las instalaciones redondelanas por "falta de competitividad, viabilidad económica y sobrecapacidad", y trasladará su producción a Rumanía, donde los costes –incluido el de la mano de obra– son más baratos y el volumen de trabajo es mayor. Esta empresa de Redondela se constituyó en 1999 bajo el nombre Universal Textil de Galicia (Unitexga) y a mediados del año pasado fue adquirida por la francesa Michel Thierry. Meses más tarde, en noviembre, el consorcio americano Johnson Controls se hizo con el control de Michel Thierry y de todas sus factorías, incluida ésta, que ya atravesaba una delicada situación económica desde la pérdida de contratos locales.