Los empresarios del Metal lanzaron ayer un ultimátum a los sindicatos. "Esta es nuestra última propuesta, tal y como está la situación no podemos hacer nada más. O la aceptan o tendremos que plantear la continuidad del convenio del pasado año y aplicarle el IPC", señala el portavoz de la patronal Enrique Mallón. Los responsables sindicales por su parte señalaron que "el periodo de reflexión no ha servido para nada y advierten de que los trabajadores pueden volver a salir a la calle".

Esta es la primera reunión efectiva tras la "tregua" en el conflicto del metal en la que ambas partes volvieron a poner encima de la mesa sus respectivas posturas, aunque el lunes 28 de agosto se celebró un encuentro que sirvió para poner las bases de las conversaciones.

A la reunión celebrada en la tarde de ayer en el edificio de la Xunta, que tuvo una duración de cuatro horas, asistieron las partronales de cinco asociaciones afectadas por el convenio, los responsables del sector del metal de la CIG, CC OO y UGT y los mediadores de la Xunta: el presidente del Consello de Relacións laborais, Demetrio Fernández López; el jefe Territorial de la Inspección de Trabajo, Carlos Domenech de Aspe; y el jefe provincial de Trabajo, José María Casas de Ron.

Los principales asuntos puestos encima de la mesa fueron la vigencia del convenio, en el que existe un preacuerdo para que su duración sea de tres años; la regulación de la jornada, en la que los sindicatos hicieron hincapié en la "barbaridad" que significa pedir un día de asuntos propios con una antelación de 45 días; y el incremento salarial, punto en el cual la patronal ofrece un incremento del 2% para este año; el IPC más el 0,5% para el próximo año y para el siguiente.

"En estos momentos lo que ofrecemos es un esfuerzo importante. A los dos partes nos interesa cerrar cuanto antes el convenio. A los empresarios porque necesitamos trabajar con tranquilidad y a los trabajadores porque, en el caso de no alcanzarse un acuerdo, tendrían que conformarse con la prórroga del convenio de 2008 más un incremento del 0,5%", indica Mallón.

El portavoz de la patronal Asime también señaló que de no alcanzarse un acuerdo este año, "en 2010 que nadie espere que nos van a poder pasar la factura de años anteriores".

Mientras los sindicatos consideran que las posturas "están muy alejadas", desde Asime se considera la probabilidad de que el próximo martes se llegue a un acuerdo.

Mallón adelantó la posibilidad de que los mediadores de la Xunta aprovechen el fin de semana para convocar a las partes por separado y preparar el terreno para un acuerdo en la próxima reunión.

"Creíamos que después de este paran la patronal daría movimientos definitivos, pero no nos ha ofertado nada después de dos meses sin movilizaciones", asegura Ramón Sarmiento de CC OO. Para Diego Atanes de UGT, "la patronal no puede ofrecer lo mismo tras este periodo de reflexión". Y Miguel Anxo Malvido, al igual que sus compañero, cree que "los trabajadores podrían volver a la calle".