El Consejo de Administración rechazó la marcha de Roberto Feáns hace poco menos de un mes. El director deportivo puso a su cargo a disposición de la directiva después de que el Pontevedra cayese contra el Atlético de Madrid B, el 17 de diciembre, en el último partido de la primera vuelta. Sin embargo, los dirigentes acordaron ratificarle como máximo responsable de la dirección deportiva de la entidad.

Tras esta ratificación, el Consejo entendió que era el momento de buscar soluciones ante la crisis deportiva del club, que por aquel entonces acumulaba nueve encuentros sin conocer la victoria. Y propuso el cese de Luisito, que fue votado por una mayoría de los consejeros. En esa decisión no influyó

El martes 19 de diciembre, varios responsables de la entidad se desplazaron hasta Santiago para comunicarle al técnico que el Pontevedra dejaba de contar con sus servicios y con el de sus ayudantes, Pepe Rico y Roberto Valdés.

Los malos resultados, unidos a las sensaciones negativas que había ofrecido el equipo en las últimas semanas fueron el detonante de una decisión difícil, pues tan solo un mes y medio antes, el consejo de administración había ratificado al técnico tras presentar este su dimisión en Talavera de la Reina, tras perder por enésima vez puntos en los últimos minutos.

Crítica de Argibay

Roberto Feáns admitió en la junta de accionistas del pasado lunes que este curso se habían "equivocado" en los fichajes y adquirió responsabilidad poniendo a su disposición su cargo semanas antes.

Sin embargo, esos dos hechos no fueron excusa para que el consejero Alberto Argibay, del que fuentes internas aseguran que se encuentra prácticamente desvinculado del día a día del club, criticase la parcela deportiva del Pontevedra y acusase a Feáns de no estar preparado y de no tener una correcta estructura de captación de jugadores.