La Unión Deportiva Ourense pierde para el asalto a los puestos de ascenso, en el partido del próximo domingo (16.00 horas) contra el Atlético Arnoia en O Couto, a uno de sus talismanes. El lateral Marcos Otero resultó lesionado en una dura entrada de un jugador del Melias y verá truncada su racha de diez titularidades. Ha sido la decena de partidos que han impulsado el despegue de los unionistas de la décima a la tercera posición, hasta colocarse a un solo punto del trampolín a Primera Autonómica.
Otero atribuye, con toda modestia, a "una coincidencia" ese tramo feliz en lo personal y en lo colectivo desde la derrota en Amoeiro hasta el triunfo del pasado domingo en el encuentro que cerraba la primera vuelta. "El equipo no se conocía al principio. Nos costó arrancar, pero ahora todo va más fluido. Nos conocemos mejor y sabemos bien a qué jugamos".
La culpable de que se cierre ese paréntesis es su rodilla derecha, explicaba ayer el lateral. "Me cuesta estirar la pierna y cojeo un poco. Me han mirado y el tendón que viene del cuádriceps está algo inflamado. Por ahora no puedo jugar". Lo dice con un deje de tristeza, cuando en septiembre no hubiese ni imaginado que iba a jugar diez partidos titular seguidos en la UD Ourense. "No lo veía claro -recuerda-. Estaba 'chupando banqueta', pero pensaba en esforzarme para que me dieran la oportunidad y aprovecharla. Ahora las cosas me están saliendo bien".
La mejor definición de lo que ha ofrecido en el campo para ganarse la confianza del entrenador es ese tesón. "Técnicamente no soy nada del otro mundo, pero si juego es porque le echo ganas y voy con todo al balón. Es de lo que se trata". Su potencia le permite avanzar desde campo propio y, en el partido de Copa contra el Santa Teresita, firmó uno de los goles más espectaculares que ha visto la afición de la UD Ourense esta temporada. Por exigencias del guión también le han encargado el cometido de interior, pero confiesa una vocación defensiva: "Me siento bastante más cómodo en el lateral".
Confirmada una baja que el cuerpo técnico barajaba desde principio de semana, la defensa unionista se someterá a la enésima reformulación ante el líder, porque también faltarán el polivalente Sergio y Julio Álvarez, que continúa de baja. Lucas Nieto gana enteros en esa reorganización tras reaparecer en la cita copera de Eiroás del pasado 27 de diciembre.
Otero asegura que el equipo es consciente de la relevancia de un resultado con el que se puede pasar página a los malos momentos vividos en el tramo inicial de liga. "Sabíamos que había mucha que está ilusionada con el proyecto y nos dolía perder no solo por nosotros, sino porque ves que te vienen a animar incluso cuando no nos salen las cosas. En el vestuario buscamos explicaciones, pero sabíamos que esto iba a terminar funcionando. Solo se necesitaba tiempo".
La experiencia que atesora un sector mayoritario del plantel ayudó a enderezar el rumbo. También el de los nuevos, entiende Marcos Otero. "En ese aspecto estoy muy contento porque los veteranos me cuidan mucho. Siempre están muy pendientes, intentando enseñarnos cómo hacer las cosas. Por la experiencia que tienen, estamos aprendiendo un montón con Xurxo, Tito, Lucas Nieto o Fran", afirma.
La UD Ourense deberá emplear todas sus virtudes en el intento de doblegar al mejor equipo de la liga hasta la fecha. "Sabemos que es un partido muy importante. Van de primeros, son un equipo duro, pero ya que nos hemos enganchado, tenemos que ganar para meternos arriba. Si les ganamos, empataremos a puntos y es una oportunidad muy buena. Si perdemos nos podemos desenganchar otra vez, por lo que hay que salir con todo y seguro que vamos a ganar", augura el jugador unionista.
Marcos Otero lo verá desde la grada de un estadio en el que está encantado de haber tenido una oportunidad como futbolista: "Jugar en O Couto me parece muy bonito. Es un buen campo, hay días que vienen 600 o 700 personas a los partidos y eso me gusta. Y además nos beneficia por el estilo de juego que tenemos".
