Dos puntos en lo numérico pero, sobre todo, en lo anímico. Esa es la valoración que el técnico del Frigoríficos del Morrazo, Víctor García, "Pillo", realiza de la victoria frente al Anaitasuna en un final agónico. "Nos hemos quitado un corsé, sacado una mochila de la espalda, y las caras ya son diferentes", afirma el preparador, consciente de que tras un inicio complicado con dos derrotas seguidas, los puntos ante los navarros suponen un acicate moral más que necesario para una joven plantilla. "Si encadenamos otra victoria afrontaremos mucho mejor los próximos partidos", augura.
Las sensaciones del preparador de los de O Morrazo son de que, "con las estadísticas en la mano, creo que tendríamos que haber ganado con más holgura. Jugamos fatal el final y ellos, a la desesperada, sacaron provecho", señala, antes de añadir que "nos faltó madurez en esos momentos. Lo que está claro es que no podemos ganar de tres a falta de 1.50 y que nos empaten. Teníamos que haber jugado un ataque largo, bueno, aunque nos estaban haciendo una doble mixta". Con todo, el técnico destaca que "logramos una victoria excepcional contra un auténtico plantillón, una victoria que le da cierto lustre al equipo".
Ayer fue el día para corregir algunas cuestiones y comentar el partido. La defensa centra buena parte de la preocupación del cuerpo técnico, a pesar de que su rendimiento fue mejor que el de los dos partidos anteriores. "En el primer tiempo cada equipo hizo 22 ataques, pero en el segundo ellos llegaron a los 38. El partido se revolucionó de más, y es cierto que meten 19 goles, pero con 38 ataques", afirma Pillo, a la vez que apunta que "en ataque posicional solo causaron problemas e la zona del lateral izquierdo. Ahí Nadoveza nos mató, pero tampoco demostraron una gran superioridad en el juego de ataque".
El entrenador del Cangas, especialista en montar equipos desde la retaguardia, asume que es en esta parte donde le queda más trabajo por hacer, como es lógico después de los cambios en la plantilla. "Hay que ir acoplando todo, la colaboración con la portería. Nos queda mucha tarea", señala, pero afirma de modo optimista que "acabaremos consiguiéndolo". Sin la alargada sombra de Fernando Eijo, imprescindible en la última década tanto por rendimiento deportivo como por ascendencia en el vestuario, el tiempo es necesario más que nunca.
En el apartado ofensivo, todo parece marchar mejor. "El equipo ya se encuentra bastante cómodo. En Puente Genil estuvo bien, se soltó un poco, y con el Anaitasuna fue mejor", afirma. La capacidad de penetración de David García, su juego con Muratovic, y el lanzamiento exterior de Potic y Milosevic le da un amplio abanico de posibilidades a los morracenses. "Ofensivamente el equipo está encarrilado. Habrá altibajos porque es gente joven, pero ya tenemos claro lo que hay que hacer, y si falla uno otro tendrá un buen día", sentencia Pillo.
