- ¿Qué valoración hace de la temporada que ha realizado su equipo?
- Estoy muy contento y feliz. Creo que hemos acabado muy bien el año, así que la valoración tiene que ser positiva. Sabemos un poco mejor dónde estamos en este presente, que es algo importante.
- La temporada ha estado muy condicionada por las lesiones y ausencias por motivos personales de algunos de sus hombres más importantes.
- Por mi forma de ser y de ver la vida creo que cuando un grupo está mal se puede y se debe convencer de tirar hacia delante. Es necesario ser muy positivo, siempre muy cercano al jugador, para que puedan crecer. En la vida se puede ser capaz de todo y ahora mismo estamos convencidos de que, a cualquier equipo que jugó la fase de ascenso, le podemos competir. La vida es un estado de ánimo.
- ¿Tiene la sensación de que pudieron terminar la competición más arriba?
- No, creo que quedamos donde nos puso la competición. El Atlético de Madrid por ejemplo descendió hace no mucho a Segunda División. No tenía jugadores para bajar pero se metió en una mala dinámica por lesiones y cosas negativas. Cuando te metes en eso es difícil salir. Nosotros, por razones de lesiones, nos metimos en una dinámica un poco negativa. Tiene mucho mérito salir de esa dinámica, siendo fuertes de cabeza. Nos convencimos de que podíamos hacerlo y ahora estamos convencido de que podemos hacer más.
- ¿La temporada les ha servido para crecer como equipo?
- Sí, al cien por cien. A nivel individual, todos los jugadores han crecido desde septiembre hasta mayo. Desde los más veteranos a los más jóvenes han mejorado una barbaridad. Algunos han crecido muchísimo y otros, a pesar de las lesiones y los problemas personales, han terminado al nivel que se esperaba de ellos. La gente veterana por ejemplo se ha mantenido en su nivel.
- Hace tan solo unas semanas decía que sus hombres iban aprendiendo lo que usted quiere de ellos como equipo. Sorprenden sus declaraciones después de varios años al frente de este equipo.
- Las ideas y las metodologías cambian con los años. Yo tengo mi propia idea de juego y desarrollas tus ejercicios para llegar a esa idea. A partir de ahí hay otra tarea, que es conseguir que los jugadores crean en tu idea de juego. Para eso necesitas tiempo. Si el jugador no cree en ella no vas a ningún lado. Es mejor algo simple que todos sepan, que algo muy novedoso que no convenza. Estamos por ejemplo desarrollando un mejor juego de cinco para cinco. La gente lo va pillando poco a poco pero no es fácil. Creo que todavía estamos al 25 o al 30 por ciento de ese proceso de aprendizaje. También interviene el aspecto psicológico. Hay que convencerse de que puedes hacerlo cuando no estás bien. Saber que puedes competir con cualquiera es una filosofía de juego pero también una filosofía de vida que fuimos asumiendo.
- El año pasado decía que sacaran la gamarra y no se le diera importancia. ¿Este año tiene la misma sensación?
- No, todo lo contrario. El año pasado hicimos algo muy bonito y este año queríamos repetir pero vinieron las lesiones. El año pasado tuvo mucho mérito porque llegamos a ir primeros. Este también tiene mérito pero es diferente. Sigo diciendo que es increíble que nosotros peleemos con estos equipos. El sábado jugamos contra Coruña, que tiene un juvenil que estuvo en el campeonato de España. Nosotros no tenemos ni juveniles. Tenemos lo que tenemos. Los jugadores jóvenes que llegarán ahí. Lo harán con paciencia, con trabajo y riéndonos.
- ¿Ve a los jóvenes asentados?
- Sí, solo puedo hablar maravillas de los más jóvenes. Jugadores como Carra, Pepe, Marcos o Juanma están ya dentro de la rotación. Todos han crecido una barbaridad y están para los minutos de la verdad.
- ¿Sigue David o no sigue David el próximo año?
- David tiene cuatro posibilidades. Una es el baloncesto profesional, como ayudante. Otra es seguir aquí. La tercera es buscar alguna otra opción diferente que me ilusione. La cuarta es retirarse. Todas son fantásticas. En cuanto al equipo, creo que tiene futuro. Se marcha Andrés pero la gente joven está preparado para asumir. Siempre toca pensar en lo siguiente. Sabemos que a Andrés lo tendremos ahí para ayudar.
