Contra todo pronóstico el Calmear Raseiro plantó cara al Calvo Xiria, líder intratable. Lo hizo en un partido que pudo haber tenido otro desenlace de no mediar la polémica arbitral cuando en el minuto 55, y con un 19-20 en el marcador, la pareja de colegiados excluyó a Quito con cuatro minutos, primero por una acción controvertida ante un contrario y, acto seguido y sin reanudar el juego, por entender las observaciones del capitán grovense como protesta. Fue demasiada ventaja para el líder que no perdonó en ese tramo decisivo.

Sabedor de que no tenía nada que perder el Rasu se creció desde el arranque. Lo hizo partiendo de un 6-0 defensivo solidario que no permitía al rival anotar fácil y que además estuvo bien pertrechado atrás por un excelente Adri en portería. Mientras en ataque, con paciencia, el Rasu aseguraba cada posesión para atacar las defensas 5-1 y 3-2-1 que proponía el rival.

Así las cosas, el Rasoeiro llegó a mandar en varios momentos de la primera parte. En el tramo final el Calvo Xiria en un robo de balón logró empatar sobre la bocina, en uno de los dos únicos contragolpes que el Rasu le permitió en todo el choque, y de esa forma pudo irse al descanso con un 10-10.

En la segunda mitad pareció por un momento que el líder rompía el partido al lograr un parcial de salida de 2-6 que llevó el electrónico a un 12-16 (m. 38). Pero el Rasu se rehizo, de nuevo a base de defensa, para empatar a 18 con gol de Moto. A partir de ahí, minutos de igualdad y mucha tensión tanto en la cancha como en la grada, hasta que llegó la controvertida doble exclusión de Quito que decantó el choque. Aun así un gol de Sergio parecía dar vida al Rasu (20-21), pero la posterior exclusión de Bruno dejando al Rasoeiro ya con dos hombres menos finiquitó las opciones grovenses.

Pese a la derrota satisfacción en los locales. Su técnico Quito Parada, aun dolido por la actuación arbitral en ese tramo final, alababa la labor de los suyos: "fue un partido excelente que tuvimos en la punta de los dedos ante todo un líder".