Exhausto, con la voz entrecortada por el esfuerzo recibía Óscar Bernárdez la felicitación de los presentes por su triunfo en la Subida ao Castro tras una exhibición de fuerza y estrategia en una ascensión frenética en la que casi no hay tiempo de planificiar.

"La fuerza es la clave. Quizá no sea importante ser rápido, pero sí la fuerza", decía poco después de cruzar la meta. Reconoció el corredor de Salvaterra de Miño que corrió "con la referencia de Daniel Bargiela". "Venía también otro chico por detrás, Miguel Daporta, y hubo que apretar. Si quería llegar arriba tuve que arriesgar", prosigue.

Bernárdez cuenta que "Dani Bargiela fue por delante hasta llegar a las escaleras. Al llegar al Concello, como venía gente por detrás, pensé que si quería ganar tenía que arriesgar", explica.

Para ganar en O Castro lo único que hace falta, según Bernárdez, es tener "buenas piernas". "Puedes tener ritmo, pero si no tienes fuerza para subir es muy complicado", anuncia. Lo dice él que ya había corrido la pasada edición, en la que fue quinto (11:47).Este año le arañó unos buenos segundos a su registro (11:16).

El secreto se basa en la "rutina y en meter la última semana un poco de fuerza. También se nota si metes un poco de fuerza en la pretemporada", sostiene el atleta, que aún no sabe si acudirá a la Carrera del Pavo porque está preparando el Maratón de Castellón.