Anécdotas al margen, Aspas cuenta ya con un importante desafío: recuperar la titularidad después de dos jornadas consecutivas en el banquillo. Y el moañés admite que no ve fácil volver al equipo. "Siempre tengo expectativas, sobre todo a principio de semana, que vienes con la moral renovada. La verdad es que la cosa está difícil porque la gente está trabajando bien y el míster sólo puedo elegir a once. Pero todos se lo estamos intentado poner difícil", destaca.

El futbolista morracense asume con responsabilidad, aunque sin conformismo, su nueva situación en el equipo. "A principio de temporada estar en el primer equipo ya era un premio, aquello por lo que había luchado ocho años. A lo mejor no pensaba jugar tanto pero cuando te quitan, claro que te jode un poco, y luchas para poder volver", señala.

Tampoco se queja Aspas de un sistema, el 4-3-3, que no favorece demasiado sus condiciones. "A lo mejor es este sistema no es el más idóneo para mi posición, pero la verdad es que no me puedo quejar porque me he jugado en casi todos los puestos y me ha dado minutos y también más libertad", explica.

El media punta canterano confía en volver a disponer de minutos mañana ante el Recre, del que guarda un buen recuerdo, pues anotó hace unos meses en el Nuevo Colombino el gol que dio al Celta su primer triunfo esta temporada. "En el partido de ida empezamos mal, pero le dimos la vuelta al marcador, conseguimos ganar y marqué un gol", rememora.

Iago Aspas lamenta sin embargo que Bernardo, ex portero del Alavés actualmente en las filas del Recre, no defienda mañana en Balaídos la portería del conjunto andaluz. "Sí que es una pena que no esté, he jugado dos veces contra él y le he marcado tres goles. No me puedo quejar, la verdad", apunta.

En un ejercicio de autocrítica, el futbolista moañés reconoce que el Celta no ha podido resolver hasta la fecha su grave problema de pegada. "Es algo con lo que tenemos que convivir., ésa es la realidad", subraya. Y apunta: "Se ha confeccionado la plantilla para hacer un fútbol bonito y quizá ha faltado un poco de gol, no sólo por los fichajes, sino también por nosotros mismos, que a veces pensamos más en el pase que en el tiro".

El moañés augura un final de temporada difícil para el Celta, aunque no cree que la juventud de la plantilla sea un inconveniente para soportar la presión que supone la batalla por eludir el descenso. "Creo que lo podemos llevar bien porque los veteranos ya saben lo que toca y la gente de filial también está acostumbrada a sufrir porque en años anteriores también las hemos pasado canutas", indica.