La dramaturgia gallega se reúne este fin de semana en Santiago dentro de las jornadas "Drama Turgente". El sector comenzó ya ayer a analizar el panorama de la creación y la edición con la participación de dramaturgos, editores, escritores y otros profesionales. Fefa Noia fue la encargada de inaugurar este evento como directora del Centro Dramático Gallego (CDG), una de las entidades organizadoras.

-¿Cuál es el objetivo de las jornadas?

-Se trata de ver en qué momento se encuentra la dramaturgia gallega y de localizar las deficiencias que se dan. Lo que más me interesa es ver qué tipo de actividades puede promover el Centro Dramático Gallego para solventar estas deficiencias.

-¿Cómo diría que es ese momento ?

-Tengo una opinión un poco encontrada. Por un lado, me parece magnífica porque hay propuestas de índole muy diferente, muchos autores, mucha calidad y talento, así que está en buena salud. Se da además la casualidad, no solo en Galicia, también en el panorama nacional, de que la figura del dramaturgo se está reivindicando. Pasamos etapas en las que los actores y actrices eran lo fundamental en el fenómeno teatral, después pasamos a la fase de los directos y ahora creo que los dramaturgos están saliendo al paso. Por otro lado, todo el apoyo es poco. No solo el apoyo presupuestario es importante, sino tratar de aumentar la visibilidad de nuestros creadores.

-¿Cuáles diría que son las limitaciones que encuentran?

-Hay una realidad que tenemos que tratar de modificar, ya se está comenzando a hacer pero, tenemos que conseguir que las compañías estrenen más textos escritos por dramaturgos gallegos contemporáneos. Y después, hay que intentar que trasciendan Galicia. La primera instancia es la recepción en Galicia, que los espectadores gallegos conozcan más a sus autores porque tienen un papel primordial en el teatro, son los que van a tematizar y a hablar de mí realidad, pero tienen que abrirse hacia el panorama nacional.

-¿Cómo se consigue?

-Se puede conseguir hablando con la profesión fuera de Galicia, que es lo que estamos haciendo, y buscando todas aquellas convocatorias susceptibles de que se presentes nuestros autores. Se está empezando a hacer, pero es que hay muchos que pueden ser más conocidos aún.

-Ahora hay mucha creación dedica al público infantil, ¿a qué se debe?

-El público infantil y adolescente, que son dos vertientes diferentes, estuvo descuidado durante algún tiempo y en la última época se le ha vuelto a prestar atención. Me da la impresión de que habrá una especie de selección natural y que en unos años no quedarán todas las propuestas que hay hoy en día. En todo caso, es muy positivo porque es una inversión para crear público para el teatro.

-En unas semanas cumplirá un año al frente del CDG, ¿qué balance hace?

-No he tenido tiempo a pararme y reflexionar. Lo que puedo decir es que dentro del marco de realidad en el que tenemos que trabajar, vamos consiguiendo pequeñas metas y por ahora estoy muy satisfecha, aunque siempre se puede estar más.

-¿Qué puede esperar el espectador de esta temporada?

-No puedo adelantar contenidos, pero lo que sí puede esperar seguro es una apuesta clara por el diálogo intergeneracional entre artistas de siempre y nuevos que llegan pisando muy fuertes, la irrupción muy deseada de Valle Inclán y muchísima ilusión por nuestra parte.