"No me siento autorizada para hablar de la escritura porque yo misma estoy aprendiendo a escribir, pero el protagonista de mi novela es un escritor porque quería hablar de la dependencia que tenemos los de este oficio hacia las personas que nos cuidan". Con esta humildad presentaba ayer Dolores Redondo (San Sebastián, 1969) en el Club Faro su nueva novela, "Todo esto te daré", ganadora del Premio Planeta 2016. La autora, que ha vendido más de un millón de ejemplares de su exitosa Trilogía del Baztán, formada por "El guardián invisible", "El legado de los huesos" y "Ofrenda a la tormenta", estuvo acompañada en Vigo del finalista de los premios literarios más importantes de España, Marcos Chicot (Madrid, 1971), que recibió el galardón por su novela "El asesinato de Sócrates". Ambos fueron presentados por el periodista Rafa Valero, que fue dando la voz a cada uno de los invitados y estableció finalmente un diálogo entre ambos.
El origen gallego de Redondo, que sitúa su nueva novela en la Ribeira Sacra, centró buena parte de la charla de la escritora. "Mi padre era uno de los muchos gallegos, él de Sanxenxo, que tuvo que irse a vivir fuera para trabajar, pero Galicia es algo que nunca dejó atrás. Además, la madre de mi madre era también gallega, de Corme, y me inició en la mitología gallega, historias de aparecidos, de demonios y meigas que, aunque por el miedo me hicieron dormir muchos años con la luz encendida, también estimularon enormemente mi imaginación", relató ante su público, repleto de seguidores de sus anteriores novelas.
La Ribeira Sacra entró en su vida cuando su hermana y su marido se mudaron a la zona. "Mi hermana, que sabe que para mí los escenarios de las novelas son esenciales, me dijo que tenía que ir a conocerla, que me iba a encantar, y sucedió así, me robó el corazón con sus paisajes, el orgullo de sus gentes, su microclima, su delicioso olor, colores y hasta su niebla", contó la escritora vasca.
En "Todo esto te daré", un escritor, Manuel, llega a Lugo para identificar el cadaver de su marido, Álvaro, aparentemente fallecido en un accidente. Sin embargo, el protagonista se encuentra con una familia de nobles gallegos, con numerosas propiedades, y la sospecha que le trasmite un guardia civil a punto de jubilarse de que la muerte haya podido ser un asesinato.
"Se trata de una investigación muy distinta a las que tengo acostumbrados a mis lectores, ya que es una investigación civil, y lo planteo como un homenaje a mis primeras lecturas en mansiones como las de Agatha Christie, en las que era necesario introducirse en la familia para poder tirar poco a poco del hilo que llevara a la verdad", afirma Redondo.
La autora confesó "la forma radical" en que cambió su vida tras la publicación de la primera parte de su exitosa trilogía y como ha podido dedicarse a la literatura "gracias al apoyo de mi marido y de las personas que resuelven las cosas de mi vida cotidiana para que yo pueda dedicarme a mi mundo de ficción".
También el finalista del Planeta, Marcos Chicot, aseguró que él tuvo el valor de dejar su trabajo como psicólogo para dedicarse de lleno a la literatura gracias al apoyo de su mujer "que hace las veces de madre y padre con nuestra hija Lucía en muchas ocasiones". El autor escribió unos años antes "El asesinato de Pitágoras", que quedó cuarta en los Premios Planeta de 2012 pero, como no llegó a publicarse, el escritor lo hizo él mismo por internet, convirtiéndose en la novela digital más vendida en 2013.
"El asesinato de Sócrates" es un thriller histórico ambientado en la Grecia Clásica y protagonizada por Sócrates, pero el autor dejó claro que "no es ni una novela de filosofía ni meramente histórica sino que con un rigor histórico enorme trata de contar una historia muy entretenida y llena de emociones que atrapa al lector y le aporta, en cada página, una pincelada de la Historia, de forma sutil, para que al final de la novela el lector componga un cuadro y tenga realmente, sin haberse dado casi cuenta ni aburrido, una buena idea de lo que fue ese periodo histórico tan apasionante".
Chicot destacó e invitó a reflexionar sobre los paralelismos entre "la corrupción política actual y aquellos hombres de la Grecia Clásica que empezaban a dedicarse de forma profesional a la política y entre los que ya surgieron los primeros corruptos; no ofrezco una visión nada edulcorada de la Democracia sino que la desmitificó", advirtió el autor, que dedica esta novela a su hija, que tiene síndrome de Down, y dona el 10% de lo que obtiene por sus novelas a organizaciones de ayuda a personas con discapacidad.
Dos novelas muy visuales "para lectores del mundo actual"
- La adaptación cinematográfica de "El guardián invisible", primera parte de la trilogía de Dolores Redondo, se estrenará el 3 de marzo de 2017, dirigida por Fernando González Molina, con guion de Luiso Berdejo y protagonizada por Marta Etura. La escritora aseguró estar encantada con el resultado y haber seguido muy de cerca el proceso de creación de la película. "La primera vez que fui al rodaje vi la escena en que la protagonista estaba en el funeral de una de las niñas muertas, ante un pueblo indignado por sentirse desprotegido. La interpretación de Marta, sin ni siquiera hablar, transmitía esa misma imagen de una persona cargada de dolor que yo quise transmitir y me dieron ganas de ir a abrazarla", relata la autora.La forma de escribir de Redondo, la describe ella misma como "muy visual" y aseguró que estaría encantada "de que esta nueva novela también fuera llevada al cine y, por supuesto, obligatoriamente rodada en la Ribeira Sacra, porque es algo esencial", indicó Redondo, que también deseó que, como en el Baztán, "la novela provoque que se cree una ruta literarias en esta zona de Galicia".También la novela del finalista está escrita de una forma muy visual. "Me documenté con más de 50.000 páginas para conseguir contar hasta el mínimo detalle de las escenas, para que el lector pudiera imaginarse totalmente dentro de la novela", indicó Chicot. Tanto es así, que el escritor y psicólogo asegura que la Fundación ONCE le ha escrito para agradecerle que "los lectores invidentes son capaces de imaginar perfectamente cómo era y cómo vivían las personas en la Grecia Clásica, lo que para mí es un gran honor", contó, al tiempo que aseguró que "no podemos escribir como se hacía hace 30 años ya que ahora el ritmo es diferente".
