Las trampas para bicis y motos regresan a los montes de Gondomar. Guardia Civil investiga la aparición en un monte de Vincios de barras con clavos, de las que suelen utilizarse como medida disuasoria para impedir el tránsito de vehículos.

A raíz de una alerta ciudadana, la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Porriño pudo localizar tres de estas trampas en un monte del barrio de Figueiro. Se trata de artilugios metálicos provistos de pinchos, con dos vástagos por su parte inferior para facilitar y asegurar su anclaje y sujeción en el terreno. Los tres estaban semiocultos bajo la maleza en un sendero forestal.

Los tres objetos fueron retirados por los agentes. Al mismo tiempo se ha iniciado una investigación para conocer las circunstancias, la supuesta intencionalidad en la colocación y la identidad del presunto autor. Todo ello con el objeto de dirimir posibles responsabilidades penales por el peligroso riesgo potencial que suponen estos hechos para la integridad física de las personas que pueden transitar por este camino.

No es la primera vez que se hallan objetos peligrosos para los aficionados a pedalear o hacer motocross por el monte en el municipio gondomarés. En 2005, un grupo de ciclistas se encontró con troncos atravesados en una pista forestal de Mañufe, acompañados de una gran roca que la bloqueaba, así como un palo afilado colocado de forma oblicua, y denunciaron también el caso ante la Guardia Civil.