Se trata de una de las principales metas que desde el gobierno local y, concretamente, desde la concejalía de Urbanismo que regenta Marcelino Coto, se marcaron al inicio del presente mandato. La adaptación del Plan Xeral de Ordenación Municipal a la nueva Lei do Solo comienza a tener fechas de conclusión medianamente concretas. La normativa entró en vigor el pasado mes de abril y la adecuación del documento al nuevo marco legal permitiría acometer una serie de modificaciones en el planeamiento que desde el ejecutivo entienden necesarias para dotar al municipio de una mayor habitabilidad.

En este sentido, el concejal porriñés de Urbanismo, Marcelino Coto, comprometió su continuidad en el equipo de gobierno a la finalización, antes de que acabe el próximo año 2017, de la mencionada adaptación del PXOM a la actual legislación. Lo hizo en el pasado pleno ordinario celebrado por la corporación local y supone la concreción de un límite para un proyecto que lleva varios años encima de la mesa y que posibilitaría una actualización relevante del urbanismo municipal.

La alcaldesa, Eva García de la Torre, señala que Coto cuenta "con el total respaldo" de todo el ejecutivo en esta materia porque se trata de "un proyecto de todo el gobierno". La regidora porriñesa adelanta que los trabajos realizados por el equipo redactor "se encuentran muy avanzados" y explica que la adaptación del planeamiento urbanístico tiene su razón de ser en la intención de "reordenar el suelo del concello para conseguir más zonas dotacionales".

Plazas y zonas verdes

El propio Coto ha apuntado en varias ocasiones que la modificación y puesta a punto del Plan Xeral de Ordenación Municipal era la labor más importante que debía acometer su departamento. El objetivo del responsable de Urbanismo es crear más zonas verdes y plazas en un municipio que "piense en los vecinos y no se base, como hasta ahora, en la especulación". Coto ya indicó recientemente que en Porriño "se practicó el terrotismo urbanístico" y que su cometido es crear un "municipio abierto que, soy muy consciente de que es una labor para muchos años".

Con la fecha de 2017 en el horizonte, tanto el departamento de Urbanismo como el propio gobierno local establecen un plazo definido en el que esperan finalizar los trabajos de adecuación del Plan a la nueva legislación autonómica y cambiar una parte del urbanismo del municipio para conseguir un ayuntamiento con un mayor número de espacios de recreo y de zonas verdes para el uso y disfrute de los ciudadanos. El resto de grupos de la corporación también deberán tomar parte en el asunto para confirmar o rechazar la aprobación de los mencionados cambios.