El BNG de Soutomaior celebró ayer un acto en el multiusos de Arcade para demandar la transferencia a Galicia de la autopista AP-9 y la eliminación de unos peajes que suponen "además de un gasto importantísimo para nuestro vecindario, una traba para el desarrollo económico de Galicia".

En el acto participaron el portavoz municipal del BNG, Manu Lourenzo, y la diputada provincial, Eva Vilaverde, que señaló que la AP-9 está más que amortizada. Lourenzo denunció que los vecinos de Soutomaior son uno de los grandes perjudicados "por esta estafa" de la AP-9. "Por una parte tenemos que soportar estos peajes abusivos en nuestra vida diaria, y por otra, tenemos que aguantar una nacional 550 absolutamente saturada que atraviesa nuestro ayuntamiento, con los problemas para los vecinos y el comercio que eso trae consigo", puntualizó.