Los vecinos de Gondomar podrán beneficiarse al fin del plan de transporte metropolitano de la Xunta a principios de 2017. La Consellería de Infraestruturas e Vivenda ha iniciado los trámites para integrar al municipio en el proyecto implantado ya en los trece restantes del área de Vigo desde hace poco más de un año. El departamento autonómico envió el lunes al Concello el convenio que ambas administraciones deben firmar y que el alcalde, Francisco Ferreira, ha solicitado hasta en tres ocasiones. El texto del acuerdo va acompañado de una carta que informa al regidor de los pasos a seguir para completar el proceso.

El primero debe ser, según indica la consellería, la aprobación en pleno de las condiciones fijadas en dicho convenio. Entre ellas, la aportación económica que el Ayuntamiento tendrá que realizar, algo más de 133.000 euros repartidos en cinco anualidades.

Se trata de los mismos requisitos fijados en la propuesta que el Ejecutivo gallego había realizado el año pasado y que la Corporación municipal rechazó hasta en dos ocasiones durante el anterior mandato. Los actuales miembros del bipartito, entonces en la oposición, lo habían tumbado alegando que el plan no resolvía el eterno problema del transporte en Gondomar, generado por el conflicto de competencias que mantienen las dos concesionarias del servicio en el municipio -ATSA y Melytour-.

Pendiente la parada de Mañufe

Dicha disputa impide a la primera de las empresas acceder al casco urbano gondomareño y a la segunda, adentrarse en la estación viguesa. Aunque todavía no se ha alcanzado una solución a esta cuestión, Ferreira ha propuesto a la Xunta una alternativa que vendría a solventarla en parte. Se trata de trasladar la parada de Mañufe justo a la entrada del casco urbano, en las inmediaciones del supermercado Froiz.

La misiva de la consellería no responde por el momento a esta idea del alcalde, quien espera que la Dirección Xeral de Mobilidade la acepte antes de la firma del acuerdo.

En cuanto la Corporación dé luz verde a mismo, será la Comisión de Seguimento del Área de Transporte Metropolitano la que acuerde la adhesión de Gondomar. Después, Xunta y Concello rubricarán el pacto y se iniciarán una serie de trámites como el envío de las resoluciones a las compañías afectadas, la adaptación de los cajeros de las entidades bancarias colaboradoras para que los usuarios puedan abonar los bonos y la incorporación de las máquinas cobradoras en los buses de las contratistas.

Estas tareas podrán realizarse en el plazo de entre uno y dos meses, según informa la consellería, para que los gondomareños disfruten a principios de año de la rebaja del coste de los billetes de autobús y barco a la mitad y de la tarjeta Xente Nova, que ofrece hasta 60 viajes gratuitos al mes a los menores de 18 años.