Un bando emitido ayer por la alcaldesa accidental, María del Carmen Amoedo, avisa a los vecinos de la anulación parcial de la ordenanza que regula los ruidos en la calle, con motivo del Entroido de Verán, que se celebra mañana sábado desde las 5 de la tarde y hasta las 4 de la madrugada del domingo.
Amoedo explica que este carnaval veraniego, que cumple su decimonovena edición, "tiene ya una repercusión general" que permite equipararlo a los "actos de especial protección oficial, cultural, religiosa o de análoga naturaleza", y advierte de que "puede implicar ciertos perjuicios puntuales respecto a su incidencia acústica".
Por ello, apela a la legislación y en concreto a la Ordenanza Municipal de Protección de Medio Ambiente contra la Contaminación Acústica para resaltar que esta faculta al Concello para "autorizar una ampliación de carácter temporal en los niveles máximos en el exterior". Así, se suspenden provisionalmente los "objetivos de calidad acústica en el centro urbano de la villa" entre las 22 horas y las 4 de la mañana, con un límite de 90 decibelios en las calles.
