Dos asuntos de vital importancia despachados en un pleno relámpago. Casi sin debate y en apenas media hora, la junta de la Mancomunidade do Val Miñor dio luz verde ayer a los despidos de dos de sus dieciséis trabajadores, a la vez que aprobó, casi finalizado el mes de julio, los presupuestos para este año, de 664.631 euros. Tan solo nueve de los quince miembros de la Corporación comarcal asistieron a la sesión. Los seis restantes disculparon su ausencia.

Los ceses de los operarios, los únicos integrantes del departamento de Vías e Obras del organismo encargados de manejar la pala excavadora y la motoniveladora, serán efectivos a lo largo del próximo trimestre. Los respaldaron seis de los nueve ediles presentes, entre ellos los tres alcaldes de Nigrán, Baiona y Gondomar. Según explicó el presidente de la junta, Juan González, regidor nigranense, la rescisión de ambos contratos se enmarca en un plan de saneamiento económico financiero que el ente debe asumir por ley tras cerrar las cuentas de 2015 con un déficit de 45.698 euros, ocasionado ante el recorte de las subvenciones por parte de la Xunta al Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) y a la contratación de socorristas, cuyos importes se han incrementado.

José Cuevas, representante de Nigrán Decide, fue el único que votó en contra de los despidos, contradijo los informes de Intervención y aseguró que la Mancomunidade no presenta déficit, sino un saldo positivo de 12.293 euros. Xosé Manuel Marcote y Laura Míguez, portavoces baioneses de BNG y PSOE, se abstuvieron en la votación.

Enseguida llegó el debate presupuestario, tras el que salieron adelante las cuentas de 2016, que se reducen en poco más de 6.000 euros respecto a las anteriores, las aprobadas en 2014 por 670.355, prorrogadas durante todo el año pasado al no aprobarse las cuentas del ejercicio.

Sin inversiones

Se trata de un presupuesto de ingresos y gastos, sin inversiones, al que el Concello de Nigrán aporta 210.992 euros, el de Baiona 159.890 y el de Gondomar 137.675, complementados con una subvención de la Fegamp de 136.115. Los salarios del personal se llevan la mayor parte, concretamente 243.000 euros, mientras que la inyección de fondos al centro de día de Sabarís supondrá 66.000 euros este año al organismo, que subvenciona a la agrupación de voluntarios de Protección Civil con otros 46.000 euros.

El obradoiro de emprego Terras do Miñor y diversas reparaciones completan los costes de la entidad, que incluye una partida de 13.000 euros para la elaboración de las bases de la licitación de la explotación de la piscina mancomunada de A Ramallosa, prevista en septiembre. La nueva adjudicación de la instalación deportiva aportará desde el próximo año 25.000 euros anuales a la Mancomunidade, una retribución extra, ya que la actual concesionaria solo abona 10 euros al año en concepto de canon.