El gobierno de Gondomar rechaza la estación de bombeo que Augas de Galicia plantea instalar junto al río Miñor, en el terreno donde estaba previsto el tanque de tormentas, y planteará a la Xunta que la lleve a la parcela de la antigua depuradora, unos 200 metros río abajo, para apartarla del centro urbano. Así lo indicó ayer el alcalde, Paco Ferreira. El tripartito trabaja ya en la elaboración de una propuesta alternativa al proyecto de saneamiento del Ejecutivo autonómico para evitar la pérdida de fondos europeos, que financian el 70% de la inversión, de 3 millones.