La rehabilitación de la Virgen de la Roca de Baiona entra en su fase definitiva. El equipo de restauración de Proyecto Arte confía en liberar de andamios la escultura a mediados del mes de julio tras una restauración integral que, con un presupuesto de 57.500 euros ha permitido subsanar las profundas grietas y las humedades que aquejaban al conjunto escultórico, obra de Antonio Palacios.

Miguel Ángel García, restaurador y responsable de los trabajos, recordó ayer el trabajo ya realizado, cuyo principal objetivo era asegurar el agrietado arco de medio punto que corona la estatua y en el que se han sustituido "el 90%" de las piezas de granito que recubrían la estructura, de hormigón armado.

Una de las mejoras que más podrán apreciar los baioneses es el labrado de los cubos de hormigón que sustentaban el arco y que se han modelado con la misma forma del resto de la estructura. El otro cambio sustancial será el recubrimiento con "polvo de granito" de la barca de hormigón que sujeta la Virgen, lo que dará un aspecto "más uniforme" al conjunto, explicó García, cuyo contacto diario con la imagen le ha permitido realizar un descubrimiento.: interpreta uno de los pliegues en la base como "una ola" sobre la que levanta la figura.

Para completar los trabajos apenas queda la restauración del mosaico cerámico que recubre la cruz, la limpieza e impermeabilización de la cara y las manos de mármol