La oleada de bajas gallegas en el partido de Rosa Díez continúa en Nigrán. Tan solo cinco días después de que abandonase toda la cúpula gallega por discrepancias con Madrid, el delegado local de Unión Progreso y Democracia (UPyD), Jorge Sanromán, y toda su ejecutiva dimitieron ayer en bloque. Al igual que la dirección en Galicia, los nigranenses justifican su decisión por diferencias con los responsables nacionales.

El desencadenante del abandono en Nigrán ha sido, según explica Sanromán, la enmienda presentada por el partido a los presupuestos del estado para que se rebajase la partida del AVE Lubián-Ourense en 571,3 millones de euros y se redujese en 195 millones la inversión en el Eje Atlántico A Coruña-Vigo, "desviando esos 766,3 millones a gastos de diversos ministerios", indicó el excoordinador nigranense de la formación magenta, que lamenta que la dirección estatal haya tomado esa postura "sin contar con la opinión de los afiliados ni de los dirigentes gallegos".

Estas medidas causan serias dificultades, añade Sanromán, al partido para "calar" en la ciudadanía, al igual que "el total abandono de las delegaciones locales, que ha supuesto el cierre de la sede local de UPyD en A Ramallosa el pasado mes de marzo" y el rechazo de Madrid a dar de alta simpatizantes porque "lo único que preocupa es aglutinar afiliados que abonen sus correspondientes cuotas".