El centenario del nacimiento del médico tudense y humanista Darío Álvarez Blázquez, que se cumplirá el próximo día 30 de septiembre, es una efemérides cuya celebración se pretende por parte de un movimiento cívico cuyo espíritu recoge la moción presentada por el portavoz del BNG en el Concello de Tui, Laureano Alonso.

La propuesta se estudiará en una comisión informativa. El movimiento cívico, con numerosas adhesiones en el blog del polifacético tudense Alberto Estévez Piña, desea que se cumpla la petición de la que se hizo eco FARO DE VIGO el día 20 de septiembre de 1979, firmada por cerca de 200 vecinos, en la que se solicitó la imposición del nombre de una calle en recuerdo al ilustre tudense. "Los que suscribimos, tudenses y amigos de Tuy, nos consideramos obligados a ratificarles ahora el profundo sentimiento que en la ciudad de Vigo causó –hace ahora un año– la muerte repentina, en su propia clínica y en plena actividad facultativa, del queridísimo tudense doctor Darío Álvarez Blázquez, popularmente conocido como médico de los pobres", decían en su escrito dirigido al Ayuntamiento en aquella fecha.

Darío Álvarez Blázquez nació y paso su niñez y juventud en Tui, en compañía de sus hermanos Emilio, Xosé María, Celso, Alfonso y Álvaro, siempre rodeados del cariño de sus padres. La familia vivía en casa propia donde su padre, Darío Álvarez Limeses, tenía su consulta médica. Álvarez Limeses fue víctima de una criminal ejecución militar en 1936, y se despidió así: "A mi esposa del alma antes de comparecer ante Dios. Soy dichoso. Van a terminar mis penas. Tened resignación y valor. Dios me llama. Os espero en el cielo".

Siguiendo la vocación paterna, Darío estudió Medicina en Santiago, donde se doctoró "sobresaliente cum laude con la tesis "La vida y la obra del célebre médico Francisco Sánchez El Escéptico, profesor en Toulouse, 1550-1623".

Después de la gran pérdida de su padre, comenzó a ejercer en Tui, ya casado con Carmen Gándara, y con su primer hijo, Darío, su madre y sus hermanos menores. Son tiempos amargos que nunca olvidaría la familia, pero que sí supieron todos perdonar.

Obtuvo títulos de especialista del Aparato Circulatorio y Respiratorio, de pulmón y corazón. Fue tisiólogo. Ejerció como médico de la lancha patrullera "Cabo Fradera" y de las monjas franciscanas, doroteas y de las Hermanas de los Ancianos Desamparados, además de profesor en el Instituto de Tui. Fue médico en el hospital de la Cruz Roja en Vigo, médico general de la Seguridad Social, médico asesor de Pescanova y de los consulados de EE UU, Uruguay y Venezuela.