Dos niños y la mujer que los cuidaba fueron ayer rescatados por los bomberos tras declararse un incendio en un piso de un edificio de Coia, en Vigo. La niñera y los menores se refugiaron en el balcón de la vivienda y pudieron salir de allí una vez los efectivos apagaron las llamas, originadas en la cocina, y despejaron la zona de humo. Los tres fueron trasladados al Hospital Povisa con síntomas de intoxicación por inhalación de humo en algún caso y por el estado de nerviosismo en el que se encontraban por lo sucedido, si bien su estado no revestía gravedad.
Ocurría a las dos de la tarde. A esa hora se declaraba un incendio en la cocina de un octavo piso del edificio ubicado en el número 16 de la calle Estrada. El fuego se originó concretamente en la campana extractora. Tras recibirse la alerta, el 112 movilizó un dispositivo conformado por bomberos, Policía Local, Policía Nacional, Protección Civil y ambulancias del 061.
Fueron los bomberos del parque de Balaídos, que contaron con el apoyo de compañeros de Teis, los que se encargaron de extinguir el incendio. Con la alerta de que dentro de la vivienda había una persona con un niño y una niña, su labor arrancó con cierta dificultad ya que varios vehículos que estaban en ese momento en la calzada les impidieron en los primeros momentos utilizar el coche escalera para acceder a la casa. Ante esta situación no tuvieron más opción que romper la puerta principal del piso, blindada, para entrar.
Ya dentro comprobaron que la cuidadora y los menores se habían refugiado en el balcón. Con la tranquilidad de que allí estaban resguardados de la humareda y las llamas, los efectivos comprobaron que el fuego estaba concentrado en la campana extractora de la cocina, por lo que procedieron de inmediato a apagarlo. Las llamas calcinaron los muebles contiguos a la campana, si bien el humo se extendió por todo el inmueble, por lo que ventilaron la vivienda y abrieron las ventanas para eliminarlo y permitir que los niños y la mujer pudieran salir a la calle.
Los tres fueron asistidos por personal del 061 y trasladados a Povisa. La cuidadora, con una crisis de ansiedad, había inhalado humo. Uno de los niños también estaba muy nervioso. Las fuentes consultadas señalaron, en todo caso, que el estado de ninguno de los tres revestía gravedad.
La intervención finalizó en torno a las tres de la tarde. Los vecinos del edificio fueron desalojados, si bien tras extinguirse el fuego volvieron a sus casas. Los bomberos de Balaídos, finalizada la intervención y ante lo complicado que resulta en situaciones de emergencia como la de ayer romper puertas blindadas para acceder a los pisos, señalaban la conveniencia de contar en su parque de un dispositivo que ya está en pruebas en el de Teis, que permite una apertura de la puerta más rápida, limpia y con menos esfuerzo.
